El diario plural del Zulia

“Mami, no me quiero morir”: El crudo relato sobre el adiós de Cristopher en Especialidades Pediátricas

El pequeño de seis años murió la madrugada del 28 de febrero en el hospital infantil. Tenía 11 días con sus riñones en estado crítico. Su familia pasó siete días buscando cupo en UCI y duró solo día y medio ingresado en la sala. “Después de que se hace la presión, que empezamos a pelear, es que nos dieron el cupo en la UCI”, aseguró la madre del niño.

Los últimos 11 días de vida de Cristopher Navarro no fueron como los de cualquier niño de seis años en Maracaibo. La angustia, el dolor y sufrimiento marcaron su partida tras más de una semana en búsqueda de una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en la capital zuliana.

El pequeño había logrado superar un Linfoma no Hudking a través de quimioterapia recibida en la Fundación Hospital de Especialidades Pediátricas, pero no fue hasta el 16 de febrero, cuando aún recibía tratamiento de fase de mantenimiento en el mismo recinto que su situación empezó declinar a consecuencia de un efecto secundario del medicamento que le suministraban. Sus riñones fueron los órganos más afectados.

“Le dieron náuseas, yo le daba agua y la vomitaba. Luego, el 18 (de febrero) se le empezaron a paralizar los riñones, le ponían bombas diuréticas y bombas con tramadol. Mi hijo no aguantaba el dolor”, explicó la madre de Cristopher, Yelibeth Pérez, a Versión Final.

Cristopher Navarro

Los próximos nueve días serían un túnel a oscuras para el pequeño, quien batalló contra la emergencia como todo un guerrero. “Ya el 20 mandaron a buscar una UCI de urgencia, dijeron que tenía derrame pleural. A él le empezó a faltar la respiración, necesitaba oxígeno”, detalló Pérez, quien se enfrentó con la dura crisis del sistema sanitario en Maracaibo. El Hospital de Especialidades Pediátricas no tenía en funcionamiento su Unidad de Cuidados Intensivos, por lo que se vio en la obligación de “dar carreras” para salvar a su hijo.

Yelibeth, en medio de su emergencia, se preguntaba por qué Cristopher no podía ser internado en la unidad del hospital infantil, debido a que pudo constatar por sí misma el buen estado de la sala. “De verdad que la UCI de allá está muy bien, tiene todo, pero ellos alegaban que no había personal”, relató la progenitora, quien pasó los siguientes dos días en la “búsqueda implacable”.

Yelibeth Pérez y Angelo Navarro, padres de Cristopher

Mientras la situación se complicaba para el niño, le fue practicada una diálisis en el Servicio Autónomo Hospital Universitario de Maracaibo (Sahum). Pese a que una nefróloga de la institución le advirtió a la madre que debía quedarse internado en la UCI de este recinto, su petición fue negada por la dirección de Especialidades Pediátricas, y lo llevaron de vuelta al centro de salud asegurando que "Cristopher no necesitaba UCI".

Navarro pasó cuatro días en un viacrucis de diagnósticos y decisiones de las autoridades sanitarias en el Hospital de Especialidades Pediátricas. Mientras que en la dirección decidían si habilitar o no una camilla para él en la  UCI, el niño agonizaba y se hinchaba cada vez más a raíz de la retención de líquido en su habitación.

Vómitos de sangre e hinchazón

Wilmary Pérez, tía de Cristopher, guarda una fotografía de cómo se veía su sobrino para ese fin de semana del 25 de febrero. La imagen es tan agobiante que no puede ser publicada. El pequeño abdomen de Cristopher estaba excesivamente inflamado, sus brazos y piernas parecían voluminosas, pero no era músculo, era líquido.

Uno de sus testículos almacenó tanto fluido que creció al punto de conseguir un tamaño superior al de una pelota de béisbol. Su estado impactaba a cualquiera que lograra verlo. La paralización de sus riñones lo estaba consumiendo.

Mientras tanto, él estaba en especialidades pediátricas, sufriendo. Viernes, Sábado y domingo vomitando sangre, con los valores bajos, pero el lunes nos dicen que él estaba bien, que supuestamente no necesitaba UCI” dijo Wilmary en tono de ironía.

Su madre, Yelibeth, detalla que Cristopher estaba descompensado debido a restricciones de alimentación. “Como estaba muy hinchado, no le podían meter tanto por la vía (…) Su cuerpo necesitaba como antibiótico, entonces él empezó a presentar hambre, no podía tomar agua", explicó.

Cristopher Navarro meses antes de su partida

"Mi hijo sufrió mucho (...) me decía mami, tengo hambre, mami, por favor, dame agua”, contó la representante, quien afirma que su hijo pasó por un terror constante por sus inyecciones, dolores y noches sin dormir hospitalizado. "Todo el tiempo tenía que estar al lado de él agarrándole la mano (...) Él le tenía miedo a la muerte. Me decía mami, reza por mí, mami, tengo miedo, mami, no me quiero morir”, recordó Yelibeth.

Al ver el deterioro de salud de su sobrino y la inacción de las autoridades sanitarias, Wilmary decidió buscar ayuda. La fotografía de su sobrino llegó a manos de diputados de órganos regionales, autoridades municipales y madres de pacientes oncológicos. La petición era una sola: “Habiliten la UCI para salvar a Cristopher”.

Para el lunes 26, la señora Sheiri Rodríguez, madre de una niña con cáncer del mismo hospital, entregó una carta a la Gobernación del Zulia en conjunto con un grupo de padres para solicitar la activación de la unidad en Especialidades Pediátricas. En horas de la tarde de ese mismo día, llamaron a Yelibeth para ingresar al niño a la sala.

“Nuestros niños no tienen por qué morir”: Padres exigen reactivación de la UCI en Especialidades Pediátricas

“Después de que se hace la presión, que empezamos a pelear, que yo empecé a llamar a unas diputadas, a unos contactos que empezaron a presionar al hospital, es que nos dieron el cupo en la UCI”, expresó la madre.

Para llevar a Navarro a la unidad les impusieron condiciones específicas a sus padres. “A mí me jalan y me dan unas normas. Me dijeron, tu hijo no está de cuidado intensivo, está de cuidados intermedios, pero al ver la presión con la foto que pasaste lo ingresamos (…) No vas a entrar con teléfono. Me imagino yo que era para que no fuese a grabar, a tomar fotos en UCI, o algo así”, aseguró Yelibeth.

Las últimas palabras de Cristopher a su madre

Tras el ingreso de su hijo, el día 26, solo pudo verlo durante 15 minutos, esto, sin saber que sería la última vez que podría conversar con su pequeño. “Mamá, no me dejes solo”, fueron de las últimas palabras que Cristopher le dijo en vida a su progenitora.

Llega el día siguiente, martes 27, y Yelibeth quiso visitar nuevamente a su hijo. “Me dijeron que estaba rendido, y yo más bien me alegré porque él tenía tres días sin dormir, el dolor no lo dejaba. A él incluso le habían dado medicamentos para dormir y no había podido. Me dijeron que me llamarían cuando despertara, pero, nunca me llamaron”, continuó la madre.

“Como a las dos y media me dice la doctora: tu hijo presentó un paro, está muy mal y no creo que aguante, llama a tu familia. Yo llamo a toda mi familia. Al rato sale la otra doctora y dice que presentó el segundo paro, todos los doctores entraron para tratar de salvarle la vida a mi hijo (…) Convulsionó y ni me dijeron”, afirmó Pérez.

Yelibeth recuerda a su hijo como un niño alegre y ocurrente

Tras la advertencia de la doctora, la familia Navarro Pérez se quedó en la unidad a la espera de buenas noticias sobre Cristopher, sin embargo, las horas pasaron y llegó la policía regional. “Nos dijeron que nos fuéramos todos, que eran nuevas normas de la institución (…) Yo la verdad me la estaba llevando bien con la directora (de Especialidades Pediátricas), pero al ver estas cosas que estaban haciendo, yo dije ¡esto es conmigo entonces! (...) fue hasta ese momento que yo le creí todo lo que me decía”, describió Yelibeth, quien apuntó que la visita de los oficiales le hizo sospechar que algo malo sucedía.

Yo creo que ellos ya se imaginaban lo que iba a pasar, o a lo mejor ya mi hijo estaba muerto y no me habían dicho nada”, sentenció la fémina.

Con cantidad de dudas y pocas respuestas, recibieron la noticia de que “habían estabilizado” al niño, sin embargo, su madre no estaba del todo tranquila.

“A las 12 de la noche yo subo a UCI y estaba todo cerrado (…) Sentí un dolor muy fuerte en el pecho, no podía dormirme. A las 3:00 a.m. me llaman para decirme que mi hijo había muerto. Cuando bajo me dicen que se había complicado a las 12:00 a.m., pero que iba falleciendo a esa hora. Yo como madre siento que mi hijo ya estaba muerto y no me habían querido decir nada”, manifestó Yelibeth al recordar aquella tétrica noche.

Cuando Cristopher murió tenía 11 días con sus riñones en estado crítico, siete días en un viacrucis de búsqueda de un cupo en UCI y tan solo día y medio ingresado a la sala del Hospital de Especialidades Pediátricas.

Cristopher en el 2023, cuando recibió quimioterapia en Especialidades Pediátricas

Más de 25 niños vulnerables

Al momento de entrar a la morgue, la médico forense le manifestó a la madre de Cristopher que no podría realizarle velorio a su pequeño. “Me dijeron que su cuerpo estaba como para echarlo en una bolsa negra por el nivel de descomposición que ya tenía por dentro”, rememoró llena de dolor.

La urna de Cristopher fue entregada con un cierre cuidadoso para que nadie viera el cadáver, sin embargo, la abuela del niño no sabía de esta situación y en su ignorancia, abrió el féretro. Ella sí lo vio y ella quedó sorprendida, gritó cuando abrió la urna. Mi mamá dice que el niño botaba sangre por todos lados, se le puso grande la cabeza como un niño cuando tiene hidrocefalia, sangraba por los ojos, sangraba por la nariz, por los oídos, toda su cara, la camisa que le pusieron estaba tapada en sangre”, apuntó Yelibeth.

En medio de su tristeza, la madre del pequeño de seis años reclamó que “hoy puede ser Cristopher, mañana puede ser cualquiera”, por lo que exigió una acción más inmediata para la atención de los niños oncológicos.

Son muchos los niños que mueren por falta de UCI en el hospital, la directora dice que es por falta de personal, pero, ¿por qué no tratamos, ella como directora, y nosotros como padres, de ver cómo se puede localizar a los especialistas? ¡Se puede llegar a una solución! porque en verdad esa UCI está en buenas condiciones para recibir pacientes”, concluyó la señora Pérez.

Yeinny Noya, madre de paciente oncológico del mismo hospital donde falleció Cristopher, expuso que como padres en la misma situación se sienten indignados a consecuencia de la "indolencia de los entes gubernamentales" ante la crisis que dificulta el ingreso de un niño a una UCI.

Los padres de niños oncológicos brindaron su apoyo a los padres de Cristopher tras su partida

"De verdad que esto no puede seguir pasando, nos sentimos muy tristes porque hoy fue Cristopher, pero mañana puede ser cualquiera. Esta es una enfermedad que nos concierne a todos, no se trata de política, se trata de ser humanos con los niños (...) es urgente habilitar la UCI de Especialidades Pediátricas", reclamó.

La representante afirmó que este no es el primer caso de un infante oncológico que muere en la ciudad. "Si la parte gubernamental supiera cuántos niños entran a Especialidades Pediátricas a diario, quedarían sorprendidos", afirmó.

"Si vieran la lista de niños que llegan, la cantidad de pacientes nuevos, se tomarían más precauciones y serían más dolientes con los niños (...) te puedo hablar de que diariamente van 25 niños al hospital con nuevas patologías, porque uno los ve en la lista de ingresos", denunció Noya.

Cristopher en su vivienda
Lea también
Comentarios
Cargando...