El diario plural del Zulia

Antes y después de J. M. Keynes, por Jorge Sánchez Meleán

La obra de J. M. Keynes puso en movimiento una revolución en el pensamiento económico, desde hace 80 años. Veamos: antes de Keynes, predominaba el análisis de la e ciente colocación de los recursos, fundamentado en la teoría de los precios, del valor, de la distribución y del equilibrio parcial y general. Después, dichas teorías fueron reorientadas por el análisis de la determinación de la producción total, mediante las teorías de la renta y del empleo. Antes de Keynes, la teoría económica tenía solo validez formal, pero no se prestaba a la comprobación empírica. Después, la teoría económica se hizo operativa, pues podía desarrollarse en términos que se prestaban a la medición empírica. Apareció la Macroeconomía, formada por agregados expost, lo que estimuló el desarrollo de las cuentas nacionales o contabilidades económicas nacionales. Los gobiernos comenzaron a medir los conceptos y variables de la renta nacional. Por ello, el análisis de Keynes proporcionó el más vigoroso estímulo a la econometría. Permitió a los economistas obtener resultados numéricos. Antes de Keynes, la política económica tendía a la estabilización de los precios bajo la forma de políticas monetarias. Junto a las bajas de salarios, eran consideradas adecuadas para enfrentar el desempleo y conseguir el pleno empleo de acuerdo a la Ley de Say. Después, desapareció la con anza en las fuerzas automáticas que garantizaran el pleno empleo. La estabilidad del empleo ahora aparece como un objetivo de la política pública. Después de Keynes, se admitió que la renta nacional podía estar en equilibrio, aun cuando existiera desempleo. Por ello, las políticas monetarias fueron complementadas con la política scal. Antes de Keynes, se consideraba al dinero como neutro, pues no afectaba al nivel de producción. Después, las variaciones de los saldos en efectivo fueron relacionados con las variaciones del tipo de interés, y al ser este determinante de la inversión, básica en los niveles de renta y empleo, en última instancia también estos estaban relacionados con el dinero. Antes de Keynes, la frugalidad era una virtud que debía ser practicada por todos. Pero Keynes demostró que cuando la renta y el empleo son bajos, la frugalidad pública o privada deja de ser una virtud, pues solo el gasto de inversión puede reactivar una economía. Como puede observarse entonces, después de Keynes la Teoría Económica dio un giro fundamental y su in uencia persiste hasta hoy.

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