El diario plural del Zulia

El colofón deseado, Buffon

En la orbe del fútbol Gianluigi Buffon en sinónimo de grandeza. A sus 39 años (28 de enero de 1978), el inoxidable guardameta italiano ha ganado casi todo lo que ha estado a tiro de una nal. Incluso más. I

Incombustible. Incansable. Inagotable y altamente rendidor, aún con sus años, son algunos de los adjetivos que de nen a “Gigi”, una de las pocas leyendas activas del balompié mundial.

El capitán de la Juventus de Turín solo tiene una única cuenta por saldar antes de anunciar su retiro: Elevar sus manos por encima de su cabeza agitando una copa de Liga de Campeones. La joya que le falta a la corona de brillantes que ha recolectado desde hace casi 20 años, cuando ganó su primer título con el Parma F. C. (Copa Italia 98-99).

El sábado, ante el Real Madrid en la final de la Champions en Cardiff, tendrá, quizá, su última oportunidad para consagrarse con lo más valioso de Europa.

Tonelaje de león

Su altísima carrera, rica de récords, y su capacidad para mantener físicamente su metro 91 de estatura al nivel de jóvenes como Paulo Dybala (23 años), Kylian Mbappé (18) o alguien en su misma posición como Marc-André ter Stegen (25), le han permitido tener este nuevo chance para sellar con laureles dorados su trayectoria.

Misión final

Además, su correcto proceder fuera de la cancha, estado al margen de polémicas considerables, le tienen, indudablemente, como un referente, uno de los futbolistas más respetados por todo su gremio.

En su amplia vitrina de decoros aguardan unos 22 títulos entre clubes (Parma-Juventus e Italia), entre ellos y, quizá el de mayor valor, la Copa del Mundo de Alemania 2006, además de unos 40 reconocimientos por su desempeño personal, conseguidos tras jugar más de 1.000 partidos y más de 50.000 minutos o ciales. Cifras récords para “Super Gigi”. Pero en esa brillante estantería hay un espacio por llenar.

“Siempre he querido ganarla (la Champions) y siempre he estado convencido de que puedo conseguirla junto con mi equipo, mis compañeros y la a ción”, ha dicho en el camino hacía Cardiff. Trayecto en el que solo ha permitido tres goles en 11 juegos. “

Gigi” ha experimentado, como pocos, la sensación de quedar a las puertas de la gloria europea. Y en dos ocasiones. La primera fue en la edición de 2003, cuando su Juventus no pudo ante el Milán en una final italiana- 3-2 fue el resultado de entonces en tanda de penales.

Desde la más reciente solo han pasado dos años, la edición de Berlín en 2015. El verdugo juventino para entonces fue el FC Barcelona (1-3), a quienes dejaron en el camino esta temporada en los cuartos de final. El mundo del fútbol, y quizá hasta el mismo Buffon, pensó que aquel había sido el último tren del capitán p a r a consagrar la g l o r i a . Pero su t o n e l a j e de león lo trajo de nuevo a la tierra prometida. Esta vez en Cardiff. ¿Será la tercera la vencida?

Lea también
Comentarios
Cargando...