Mérida registra el 14 % de los suicidios reportados en el país, según ONG
Por lo menos, desde el pasado enero hasta la última semana de julio 32 personas se suicidaron en el estado Mérida, según datos del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), seccional Mérida.
Así lo informó a Efecto Cocuyo Gustavo Páez, actual coordinador del OVV en la entidad, con base en los datos registrados en el monitoreo de medios realizado por la organización.
Páez detalló que, hasta este 27 de julio de 2023, se contabilizan 224 muertes autoinfligidas reseñadas por los medios de comunicación o divulgadas por informantes claves en todo el país. Los casos registrados en la entidad andina representan 14 % de los suicidios en Venezuela.
El coordinador del OVV Mérida enfatizó que, debido a la falta de acceso a la información pública, el número de casos podría ser mayor al registrado por el observatorio. Detalló que en la región se han contabilizado ocho casos de intentos de suicidio.
Van 32 hasta el día de hoy (27 de julio). (…) lamentablemente casi que semanalmente o cada 15 días la cifra se actualiza”, explica Páez.
El profesor de la ULA informó que la mayoría de los suicidios en el estado Mérida ocurren en los municipios urbanos. “Cuando hablamos en términos absolutos el número de casos o de valores porcentuales, los municipios urbanos siempre son los que tienen los mayores, porque son donde vive más gente”, dice.
El municipio Libertador es donde se registran casos de violencia autoinfligida e intentos de suicidios en la entidad.
Factores de riesgo
Desde hace 70 años, el estado Mérida ha sido una de las regiones del país que lidera las listas de violencia autoinfligida.
Para Páez, los factores de riesgos varían de caso a caso, pero la emergencia humanitaria compleja que atraviesa Venezuela, genera condiciones de vulnerabilidad, sumando a las situaciones familiares y personales atadas a diferentes afectaciones de la salud mental: como la depresión, ansiedad y traumas, reseñó Efecto Cocuyo.
Nosotros diferenciamos tres grupos, un grupo de personas que sigue atentando contra su vida producto de factores de riesgo asociados a la crisis, otro grupo producto de factores no asociados con la crisis (asociados a problemas de salud mental) y un tercer grupo de personas que atenta contra su vida donde se combinan ambos factores”, reitera.
Páez indica que, en ocasiones, la falta de detalles e información sobre las situaciones que vivieron aquellas personas que atentaron contra su propia vida, sumada a la falta de estudios especializados, y públicos, por parte del Estado venezolanos, dificulta atender los factores de riesgos a través de campañas de concientización y programas de salud mental.
