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Alias "Conejo": el criminal que ataca a policías con armas de la propia Fanb

Ataques a industrias, extorsión, arremetida contra cuerpos policiales, son la huella que en Aragua ha dejado Carlos Gómez, por quien el Gobierno nacional ofrece un millón de dólares de recompensa a quien informe sobre su paradero y el de sus compinches

El fuego comenzó a abrasar los 12 mil metros cuadrados de la galletera. La negativa a pagar una extorsión, así como una denuncia previa contra reiterados cobros de vacunas, que dieron como resultado la detención de cuatro presuntos delincuentes vinculados con la banda implicada; originaron el ataque contra la fábrica de galletas Puig, ese aciago 8 de julio de 2019.

Fue en el estado Aragua, en el municipio Santos Michelena, cuya capital, Las Tejerías, enclavada en plena Autopista Regional del Centro (ARC), alberga una zona industrial, la tercera más grande del país, donde estaba la galletera siniestrada.

El ataque se lo atribuyen a la agrupación delictiva liderada por Carlos Enrique Gómez Rodríguez, más conocido como "El Conejo" o "Carlos Conejo".

Los representantes de la galletera denunciaron ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) que habían sido víctimas de extorsión, y una comisión detectivesca aprehendió el 10 de mayo de 2019 (menos de dos meses antes del ataque terrorista a la Puig) a Frank  Hernández (25 años), Gustavo Gil (41), Norelys Rojas (37) y Yoleidys Romero (43), señalados de pertenecer a la banda de "El Conejo", una célula de "El Tren de Aragua", reseñó El Aragüeño.

Fue uno de los primeros hechos notorios protagonizados por el grupo estructurado de delincuencia organizada (Gedo) liderado por Gómez, quien tiene un poder de fuego que podría superar cualquier cuerpo policial mejor dotado, pues posee granadas, armas largas como fusiles AK 103, subametralladoras, además de pistolas.

La distracción del parque de armas del estamento militar en Venezuela, en donde hay armamento que es desincorporado, que está en desuso y que lamentablemente es público, notorio y comunicacional culmina en manos de bandas criminales, armamento que solamente fue de uso público, de uso oficial, lo que quiere decir que ha permeado la corrupción, ha permeado un conjunto de hombres y mujeres que han hurtado material, han comercializado material bélico y ha quedado a manos de las estructuras de delincuencia organizada", afirma a Versión Final el abogado criminalista Fermín Mármol García, director del Instituto de Ciencias Penales, Criminalística y Criminología de la Universidad Santa María, de Caracas.

Mármol menciona otras dos hipótesis que considera válidas sobre las razones del poder de fuego que tiene una agrupación delictiva como la liderada por alias "El Conejo".

La droga ilícita que ingresa a Venezuela también viene acompañada muchas veces de armas y explosivos para el apresto operacional de las bandas locales. Eso ciertamente es una hipótesis válida, vistos algunos decomisos", refirió sobre una de esas hipótesis.

La otra conjetura expuesta por el criminalista habla de "'perros de la guerra', que utilizando puertos oficiales, pero también puertos clandestinos, han burlado a la autoridad y han introducido al país (...) armamentos y lo han comercializado directamente con la delincuencia organizada violenta".

En Venezuela, el poder de fuego, el apresto operacional, no solo trata de armas de fuego tipo defensivas, denominadas pistolas, sino también armas de fuego ofensivas tipo fusiles, y también artefactos explosivos tipo granadas, entre otros, un apresto operacional de corte militar, pero no existen en Venezuela armerías de corte privado, no existen personas, naturales o jurídicas que importen este tipo de materiales u objetos para la comercialización", advirtió Mármol.

Y señaló que en muchas estructuras del crimen organizado violento, sobre todo las que tienen la denominación de microestado, como el pranato carcelario, las megabandas criminales, los pseudosindicatos mineros, este tipo de armamento supera con creces al estamento de policías municipales, de policías estadales y compite con los parques de policías de carácter nacional.

Los primeros pasos de "El Conejo"

Fue en 2017 cuando "El Conejo" inició sus correrías en el mundo delincuencial. El pasado 29 de octubre de 2016, la banda liderada por Jesús Gabriel Guerra, de 26 años, alias "El Abuelo", fue desmantelada en El Consejo, cerca de Las Tejerías, y él y otros cuatro miembros, abatidos por el Cicpc.

Carlos Gómez tomó el lugar de "El Abuelo" desde ese entonces y fue cuando comenzó a liderar un imperio criminal de bajo perfil, refiere InSigh Crime.

Pequeños comercios, grandes establecimientos e industrias comenzaron a pagar la vacuna a la banda dirigida por "El Conejo".

Lo que obtenía por el pago de las extorsiones lo invirtió en drogas. Carteles colombianos asociados al narcotráfico contactaron a este antisocial para expandir el "negocio" en el centro del país, reportó Últimas Noticias.

No obstante, Mármol asevera que la delincuencia organizada transnacional, que está detrás del tráfico ilegal de drogas, del tráfico ilegal de minerales preciosos, como el oro, del tráfico de personas, de armas, municiones, explosivos, comprende que cada organización local debe hacerse cargo de su territorio.

No es cierto que un cártel mexicano, un cartel colombiano, va a darle instrucciones al grupo local que opera en Panamá, El Salvador, Guatemala, Venezuela; no funciona así, no opera así. Cada banda local sea estructurada o semiestructurada, tiene que garantizar la recepción de la mercancía, su almacenaje, distribución, y en caso de empezar a fallar puede ser sustituida, desplazada, por lo general de forma muy violenta", dijo.

Asesinato de militares y ataques a instalaciones de seguridad

Pasaron 23 días del incendio de la galletera. Esta vez la protagonista de la historia es una pareja militar.

El capitán de la Aviación, Jackson Greyber Romero y la teniente del Ejército, Ranmary Ramírez, supieron de la oferta de un Toyota Corolla en Las Tejerías.

Fueron hasta esa población para verse con los supuestos vendedores del Corolla, en la panadería El Pan Sobao. Hasta allá se acercaron unos individuos, quienes sacaron sus pistolas y el sueño de esta pareja militar, de tener un carro, se convirtió en una pesadilla.

Los maleantes mataron al capitán y a la teniente, para robarse los dólares que ellos llevaron para comprar el carro. Los atacantes eran nada menos que integrantes de la banda de "El Conejo", según medios aragüeños.

El pasado 30 de junio de 2021, la agrupación criminal aragüeña protagonizó un tiroteo contra uniformados de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) que patrullaban por el barrio Los Cachos, de Las Tejerías. Dos de los militares resultaron heridos.

Efectivos del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas), Policía del estado Aragua (Poliaragua) y el Cicpc recibieron también su dosis de plomo. La sede de la policía científica, ubicada en Las Tejerías, prácticamente fue sitiada a tiros por los integrantes de la estructura liderada por "El Conejo", al punto que los detectives no pudieron ingresar al inmueble del organismo.

Durante esos ataques, que continuaron el primero de julio de 2021, Carlos Revette, alias "El Koki" (hoy extinto) advirtió en esa fecha, a través de audios difundidos en redes sociales que iba a "prender Caracas" si la policía y los militares no se iban de Las Tejerías, en clara señal de solidaridad con Carlos Gómez.

Seis días después, un arduo operativo de fuerzas de seguridad desplegado en Caracas hizo correr a los integrantes de la agrupación encabezada "El Koki", quien huyó de la Cota 905, así como Carlos Calderón, alias "El Vampi", y Garbis Ochoa Ruiz, alias "El Galvis", sus secuaces. Esa comunidad caraqueña fue tomada por la fuerza pública y hasta ahora solo se han reportado algunos ataques contra la policía que no han trascendido a mayores.

En febrero de 2022, un fuerte operativo liderado por organismos policiales y militares en el sector La Arenera, de Las Tejerías, permitió localizar a "El Koki", a quien ultimaron en un careo; al parecer era resguardado por "El Conejo", quien en ese momento huyó de la zona.

A un año de haber sido abatido Carlos Revette, el pasado domingo 5 de febrero la pandilla de "El Conejo" atacó a balazos la sede del Cicpc de Las Tejerías y la de la Policía Nacional Bolivariana (PNB). Los tiros provinieron de la zona montañosa de la localidad. El Gobierno ordenó reforzar el Puesto General de Comando de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb), instalado en octubre en esa ciudad a raíz del deslave que dejó al menos 54 muertos.

Cuando una banda criminal, cuando una estructura del crimen, organizado o no, decide, planifica hacer un ataque hacia una estación policial o hacia una sede militar, por lo general se trata de una reacción, de una respuesta, a una acción previa de la institucionalidad. Es un asunto de represalia. La delincuencia latinoamericana violenta responde más al estímulo de la emocionalidad que a una conducta racional. El ataque a una sede de estamento público, de corte policial o militar, no produce por lo general, a mediano y largo plazo, un resultado positivo para la delincuencia. Sin embargo, de forma recurrente lo materializan, lo ejecutan, y eso demuestra una actividad totalmente emocional y no racional", apunta Mármol.

¿Desproporcionada recompensa?

El pasado lunes, el Gobierno nacional, a través del director del Cicpc, comisario general Douglas Rico, ofreció una astronómica suma como recompensa, de un millón de dólares, a quien informe a las autoridades sobre el paradero de Carlos Gómez y sus secuaces.

Esta organización criminal (dirigida por 'El Conejo') realizó ataques a comandos de la Policía Nacional, Guardia Nacional Bolivariana y Cicpc, en Las Tejerías, Aragua, manteniendo en zozobra a la población aragüeña. También realizan actividades delictivas con el narcotráfico y tráfico de armas de fuego", refirió entonces el jefe policial.

El doctor Mármol se manifestó a favor de establecer en Venezuela un portal de "los más buscados con establecimientos de recompensas"

Acota que este tipo de portales debe estar adscrito a la rectoría de la seguridad en un país y el establecimiento de recompensas debe estar reglamentado.

Sobre el monto de la recompensa, estima que depende del presupuesto que se maneje. Además, la difusión de "los más buscados" debería, a su juicio, realizarse a través de televisoras de señal abierta, en horario para adultos, "con una debida reglamentación y con varias personas solicitadas al mismo tiempo".

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