“La guerra del pan”, ¿prueba superada?

La brisa fría de la madrugada es su única compañía. Se levanta antes que el sol para caminar más de 12 cuadras. Con una bolsa de limones en la mano, Carmen Arévalo, llega a su panadería de confianza en el barrio La Polar, de Maracaibo, para comprar una bolsa de 20 panes salados.

“Tengo que cazar los panes porque en menos de hora y media no queda ni uno”, relata esta señora de 65 años, de baja estatura y encorvada por una desviación en la columna vertebral.

Nicolás Maduro, presidente de la República, anunció el pasado 10 de febrero la creación de 10.000 panaderías socialistas que, a su juicio, le ganarían la batalla a la denominada guerra económica del pan. “Quiero fundar por lo menos 10.000 panaderías artesanales, como parte de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP)”, dijo el jefe de Estado durante su programa dominical Los Domingos con Maduro. La realidad es que no se ha visto ni la mitad de esas panaderías a nivel nacional después de más de tres meses del anuncio .

“Danos hoy nuestro pan de cada día”, en Venezuela, es más que una plegaria, la gente perdió la fe desde que el sustento para vivir pasó a un plano interdiario en el mejor de los casos, otros, ni siquiera tienen dinero para comprar. Los ciudadanos se quejan por las interminables colas en los establecimientos y el poco pan que estos distribuyen.

Esta realidad es comprobada por el reciente informe del año 2016, elaborado por el programa venezolano de educación-acción en Derechos Humanos (Provea), donde 51 Organizaciones No Gubernamentales (ONG) de la nación manifestaron que en el país hay fallas en la distribución de alimentos y es menester del Gobierno garantizar el acceso sin discriminación.

Salvador Ferrer, miembro de la Asociación de Panaderías, Pastelerías y A fines del estado Zulia (Appaez) dijo que desde la federación venezolana de industriales de la panificación (Fevipan) no han aportado, hasta la fecha, información sobre la creación de las 10.000 “panaderías socialistas”.

Ferrer denuncia que las condiciones del sector panadero son precarias, sostiene que todo lo que importa el Estado es para los CLAP. “No hemos visto la primera panadería socialista, lo que sí vemos es que cada vez las condiciones de los panaderos están cada vez más agudas, varios nos dicen que cerrarán porque no pueden sobrellevar la situación”.

Maná, pan del cielo 

El maná fue el pan que Dios hizo llover desde el cielo para el pueblo de Israel. En Venezuela, el Ejecutivo intenta lo mismo, la diferencia es que no hay forma de que las medidas económicas multipliquen el pan.

Ella echa cuentos con todos los de fila mientras le quita la corteza a un limón que, según ella, le alivia el dolor de la varices. Arévalo, cada tres o cuatro días compra pan, y si no tiene dinero, le ofrece al dueño de la panadería limones o mangos que obtiene de las matas que tiene en el patio de su casa, en muchos casos, limpia el establecimiento para que le den una bolsa de pan y una porción de mortadela. “En tiempos de bonanza, había todo”¿A quién no se le dañaba el pan en un pote?, ¿Maduro dijo hace meses que crearía 10.000 panaderías?, ¿Dónde están?, todo queda en promesas porque el pan está muy caro”.

Los gremios panaderos del Zulia mantienen un hermetismo informativo, se niegan a rendir declaraciones.

Varios de ellos son dueños de panaderías y por temor a que el Gobierno les quite el suministro de insumos, pre eren no hablar. Lo cierto es que todos coinciden en que recuerdan el anuncio presidencial referido a las “panaderías socialistas”, pero desconocen la creación de al menos una en el estado Zulia.

Las políticas aplicadas por el Estado no atinan al blanco. La misión alimentación desde el 2003 intenta combatir la inflación. En el informe de alimentación de la ONG Trasparencia Venezuela, más de 23 millones de dólares ha invertido el Estado en planes alimentarios.

Promesa incumplida

Daniel Ortiz, primer vicepresidente de la Unión Empresarial del Comercio y los Servicios del Estado Zulia (UCEZ), dijo que no tiene conocimiento de que en el estado hayan inaugurado una “panadería socialista”, además, aseguró que las panaderías están importando “de todo” para no bajar las santamarías, a pesar de los saqueos que enfrentan recurrentemente.

Hasta la fecha, solo fue publicada la información de una panadería socialista, el 25 de marzo de este 2017, donde Jorge Rodríguez, alcalde del municipio Libertador de Caracas, manifestó que derrotarán “la guerra del pan”. El establecimiento está ubicado en la parroquia Macarao y según Rodríguez, produce 4.500 panes diarios, que son distribuidos por tres CLAP de la zona. El Alcalde añadió que en Caracas han sido constituidas 114 panaderías.

Los números no dan. Siguen faltando 9.986 panaderías de la promesa presidencial. José Sánchez, presidente de la Asociación de Panaderos del Caroní La Espiga Dorada (Asopacedo), detalló que en el estado Bolívar no existen las panaderías socialistas. “Hemos estado más de seis meses sin harina, si el Gobierno no puede mantener las panaderías existentes en el país, mucho menos podrá con la carga de 10.000, es puro proselitismo político, aquí no hay ni una sola”.

Carmen Arévalo con esa que si las promesas del Gobierno fueran ciertas, el pueblo viviría cómodo y en paz. “Llevo mi bolsa de pan, sé que en casa se comerán esto rapidito, más fueron las horas en cola que lo que durará en la mesa, el venezolano tiene aguante, Dios aprieta pero no ahorca, no sé cómo pero pronto saldremos de estas calamidades”, relata con voz firme.