Tomás Marco: No me voy a jubilar nunca
El compositor Tomás Marco recogerá hoy el XV Premio SGAE de la Música Iberoamericana Tomás Luis de Victoria, un reconocimiento a la trascendencia de su obra y a su compromiso con la composición contemporánea que, asegura el madrileño a sus 75 años, "continúa siendo un estímulo" para él.
"No me considero jubilado como compositor ni me voy a jubilar nunca, hasta que me muera, porque esto me sigue incitando", asevera Marco en una entrevista con EFE con motivo del premio, que recogerá hoy en una ceremonia en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.
Para Marco, doctor honoris causa por la Universidad Complutense de Madrid y colaborador como crítico musical en numerosos medios, el galardón que concede la Fundación SGAE y que está dotado con 20.000 euros (22.307 dólares) es "un premio muy prestigioso, porque incluye todo el ámbito iberoamericano".
También destaca el compositor, Premio Nacional de Música y Medalla de Oro de las Bellas Artes, el hecho de que el reconocimiento esté dirigido a compositores vivos, ya que, en su opinión, "no solo en la composición, sino en muchos terrenos artísticos, la fama y los reconocimientos a veces llegan tarde o llegan 'post mortem'".
En la ceremonia de entrega de esta tarde también se homenajeará al ganador con un concierto extraordinario monográfico sobre su obra a cargo del Cuarteto Gerhard, acompañado por Juanjo Guillem y Rafa Gálvez, dos de los miembros de Neopercusión.
Marco se plantea cada nueva obra como si fuera "la primera", como hace ahora con los proyectos en los que está trabajando, una ópera de cámara que se va a hacer en versión concierto, "Tenorio", y una cantata, "La isla desolada".
"A medida que el tiempo pasa, uno cambia como compositor, pero no quiere decir que se abandonen los caminos anteriores. Es una evolución, pero es muy perceptible que sigo siendo yo el que compone. Hay una línea de continuidad", apunta.
Pero él no es el único que contribuye a que el panorama musical contemporáneo sea tan rico como cree que es, ya que, piensa, "hay una buena cantidad de compositores distribuidos en muchas generaciones que tienen talento. Lo que falta es que se les reconozca más", remata.
