El diario plural del Zulia

Aceite quemado infarta los corazones vehiculares

Durante los últimos días ha crecido la compra de aceites sin aditivos y de refrigerantes de calidad no comprobada, que terminan por calentar el radiador de los autos

El intento de ahorrar Bs. 2.000.000 por un litro de aceite de motor importado derivó en el gasto de Bs. 60.000.000 para reparar los estragos que causan los lubricantes adulterados.

Una espesa pasta negra de aceite quemado cubrió el interior del motor de la camioneta Toyota de Andreína Ramírez. El fuerte olor a asfalto alertó que había que aparcar el vehículo que se ahogaba por recalentamiento.

El filtro de aceite quedó cubierto. Residuos de un lubricante no sellado bloquearon los conductos metálicos y elevaron la temperatura de la maquinaria, peligrosamente, a 700 grados.

“El objetivo del aceite es crear una capa protectora para evitar fricciones entre metales. El aceite que se aplicó a esa camioneta se evaporó y dejó de proteger el motor”, explicó Alejandro Rosales, técnico superior en Metalurgia e Inyección Vehicular que revisaba el deteriorado motor. Solo su mano de obra cuesta 15 millones de bolívares.

Durante los últimos días ha crecido la compra de aceites sin aditivos y de refrigerantes de calidad no comprobada, que terminan por calentar el radiador de los autos.

Ramírez comenta que adquirió el aceite hace un mes en un puesto situado en plena Circunvalación 1. Ese lapso de tiempo fue suficiente para infartar el corazón de su carro.

“Los aceites que se compren deben estar sellados y no oler a petróleo. Tampoco deben tener grumos. A pesar de los altos precios, se debe hacer el esfuerzo y recurrir a lubricantes reconocidos”, subraya Ángel Espina, quien labora en un taller mecánico situado en el sector Panamericano.

Lea también
Comentarios
Cargando...