Ter Stegen pone al Barcelona en la Final
Hay que trasladarse de inmediato al minuto 39 para contar con una acción digna de reseñar en un partido gris y que dejó las emociones para la prorroga y los penales. El Barcelona poco había mostrado en los primeros minutos donde la Real fue mejor por poco y se encontró con la efectividad de los catalanes.
En una internada por izquierda de Griezmann, los azulgrana se encontraron con el gol tras un buen centro del galo que aprovechó Frenkie De Jong, quien con un estupendo gesto técnico corrigió en el aire el salto para que el balón no lo sobrase y al contrario la mando a guardar en la red de los donostiarra. Era el 0-1 para el Barcelona que con poco, ganaba para sorpresa de los que fungían como locales.
De héroe a villano
Al 48’, una frenética Real Sociedad buscaba el empate de cara al arco defendido por Marc Ter Stegen, cuando en un centro a media altura, la “cinco”, golpeo la mano de De Jong y con demora, el principal sentenció el penal que fue avalado por el VAR.
Oyarzabal, lo convertiría en la diana del empate. Ter Stegen tendría su venganza. Pero en el 51’ todo era 1-1 y los Txuri-urdis anciaban jugar la final.
Al Alargue
Con poco que agregar dentro de los 90, blanquiazules y azulgranas se irían a tiempo adicional con los penales entre ceja y ceja. Recién en el 110’ aparecerían las emociones de un partido que se le escapó a los Imanol Alguacil pues tuvieron en sus piernas disparos al 112’ con paradón del meta alemán del Barcelona, al 114’ con un remate de Januzaj que se iría por muy poco entre los dedos del teutón y al 118’ cuando el vertical les negó el pase a la final. Todo se definiría desde los 12 pasos.
Desde pena máxima y a cinco oportunidades por lado, lo determinante seria Marc Ter Stegen, el portero se la creyó, no por nada para muchos es el mejor.
Lanzaba primero la Real, y el cancerbero catalán lo detendría. La repuesta, palo De Jong, el neerlandés seguro hoy no duerme.
Segundo duelo con Oyarzabal de la noche, esta vez ganaba el teutón que vencía en la revancha. De inmediato Dembélé pondría el 0-1.
En el tercer intento los Donostia la mandarían al vertical y Pjanic anotaría el 0-2.
A la cuarta llegaría la vencida y Merino marcaría el 1-2, ojo que Marc adivino el palo. Por los Culé, lanzaría Griezmann y el campeón del mundo la mando a guardar a la platea, todo en 1-2.
Al quinto turno Januzaj pondría el empate en la tanda máxima y por los de la ciudad Condal finalizaría todo con el que Koeman no contaba, Riqui Puig, el canterano pondría el de la victoria y el pase a la final.
El Barcelona jugará nuevamente una final de Súper Copa tras perderse la que se disputó el año pasado en suelo saudí y podría jugar ante el Real Madrid que juega este jueves ante el Athletic.
