El diario plural del Zulia

María Valeria Colmenares: la zuliana que causa furor con sus retratos de mascotas en Santiago

Con 21 años, dos de ellos como migrante en Chile, la artista plástico crece por su trabajo en la elaboración de recuerdos. Sufre de una discapacidad física producto de una parálisis cerebral infantil. Esta condición le dificulta caminar. También padeció una retinopatía que le arrebató la visión de su ojo izquierdo. Sin embargo, siempre sonríe y ve la vida con optimismo.

María Valeria Colmenares Pérez es una guerrera que se plantó, desde muy niña, ante la adversidad. Y siempre es optimista. Tiene 21 años. Nació en Maracaibo. Migró a Santiago en febrero de 2019 con su mamá, papá y abuelita materna, se graduó de bachiller en el Colegio San Francisco de Asís de la capital chilena un año después y hoy estudia inglés en un reconocido instituto del país.

Pero su historia está cargada de obstáculos. María Valeria sufre una discapacidad física producto de una parálisis cerebral infantil generada por una preeclampsia que sufrió su mamá a las 32 semanas de embarazo. “Nací prematura. Mi diagnóstico es Diplejia Espástica”, asegura.

Esta condición le dificulta caminar ya que los músculos de la cadera y las piernas se encuentran rígidos, por lo que usa una andadera para caminar. “También sufrí una retinopatía en mi ojo izquierdo por lo que no tengo visión en el mismo”, asegura esta venezolana que pese a sus limitaciones desborda optimismo.

Migrar ha sido una bonita experiencia. Chile me parece un país muy lindo. Al principio se me hacía muy difícil entender a las personas cuando hablaban debido a las expresiones que usan ya que son muy distintas a las nuestras, pero con el tiempo fui aprendiéndolas poco a poco y me adapté", detalla.

 

En Santiago en 2021, despertó su creatividad artística. “El arte siempre estuvo presente en mi vida. Recuerdo que desde muy pequeña amaba dibujar y experimentar con los colores. Mi mamá dice que dibujaba muchas mariposas. Además, es algo que proviene de familia supongo, porque mi papá entre otros integrantes de la familia, tienen facilidad para el dibujo”, asegura.

Colmenares recuerda que cuando tenía entre 6 y 7 años iba a casa de una tía que tenía muchos lienzos y pinturas. Siempre le pedía uno para pintar. Desde entonces le gustó mucho. “Soy una artista autodidacta”, sostiene.

Retomó la pintura cuando una amiga, hace dos años, le pidió hacer un retrato de su perrito Chihuahua. Subió la foto en sus redes sociales y el resultado fue increíble. Desde entonces varias personas y familiares la impulsaron a crear su propio emprendimiento con dibujos y retratos de mascotas y personas y así nació @valeriacolmenares_art.

Hoy busca que sus obras de arte generen emociones únicas en las personas que las reciben y que los venezolanos que emigraron a distintas partes del mundo tengan un pequeño recuerdo en sus hogares de sus raíces.

¡Qué grande!

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