Llegó con 500 pesos a Santiago y hoy tiene su propia boutique de pijamas
La historia de superación de Dubraska Beatriz Sánchez Carrasquel es un ejemplo para su familia y amigos. Dubys tiene 33 años, nació en San Juan de Los Morros, estado Guárico, y se graduó en la Unefa, en Maracay, como ingeniero mecánico.
En Venezuela, antes de migrar, trabajó dos años en Hidropaez, como supervisora de planta. “Soy llanera con mucho orgullo, de un pueblito que se llama San Francisco de Tiznado, mejor conocido como “Río verde”, detalla esta aficionada al canto que decidió marcharse en 2017 con apenas 350 dólares en sus bolsillos.
Con miedo, Duby viajó 7 días sin parar en ningún país. “Solo tenía dinero para el pasaje, comía galletas y atún”, recuerda.
Llegó a Santiago de Chile con 500 pesos. No le alcanzaba ni para una botella de agua. La recibió una amiga en el terminal y le prestó 20.000 pesos. Se quedó por un mes en el sofá de la sala de un amigo de la universidad. Al tercer día comenzó en un mercado persa de Estación Central, pero dejó el empleo porque no le gustaba.
Sin embargo, recapacitó y volvió al persa. Entendió que era difícil hallar empleo formal. Duró tres meses y luego consiguió en un bar restaurante como garzona. Le fue bien. Cuando logró la visa temporaria tres meses después ingresó en Walmart Chile como encargada de bodega de una empresa externa.
Desde entonces ascendió en rango y destaca como supervisora en mantenimiento de bodega. “Amo mi trabajo. Hago lo que me gusta. Lo que estudié y trabajo con gente maravillosa”, detalla. En 2019, la guariqueña asegura conoció el amor con un chileno.
Siempre que iba a Patronato le decía a mi novio: ‘Algún día voy a tener una boutique y se llamará la Boutique de Duby”, precisa.
Un día su pareja le consiguió un proveedor de ropa al mayor e invirtió 60 mil pesos. Su novio le hizo el logo. "Y me dijo: ‘No puede ser boutique. Hay muchas. Tiene que ser Dubystore y a mí me encantó. Así comenzó esta bonita historia”, detalla.
Así abrió su página en Instagram. Iniciaron con ropa, pero quería algo más exclusivo y descubrió un proveedor de pijamas colombianas espectaculares. Hizo un primer pedido pequeño y fue un éxito. Hoy hace pedidos de hasta 150 piezas.
Duby cree que fue fundamental en el crecimiento de su marca, Dubystore formar parte de un grupo de wathsapp de más de 70 emprendedoras venezolanas. Hoy prepara una colección navideña de pijamas y se enfoca en tener su propio taller, confeccionar ella misma y vender al mayor. Que Dubystore llegue a cada rincón de Chile.
"Sueño con llevar mis productos a todo Chile y venderlos en otros países, también", proyecta este mujerón que deja huella en la capital chilena.
