Jugar en el casino de manera profesional

Los casinos de la actualidad cuentan con una larguísima tradición. Algunos historiadores creen que el verdadero origen de los casinos se remonta a la Antigua China, hace alrededor de 2000 años atrás. Se cree que el keno, un juego de azar similar a la lotería, se popularizó durante la dinastía Han, la segunda dinastía imperial china. El objetivo era recaudar dinero para la restauración y expansión de la Gran Muralla China. 

Pero los juegos, de algún modo, siempre fueron parte de la vida cotidiana de los seres humanos. Ahora bien, la profesionalización del juego puede rastrearse a la Edad Media. En ese entonces, había muchas personas que se ganaban la vida jugando a los dados en los mercados y las ferias.

Sin embargo, el concepto de jugador profesional es bastante moderno. Durante la década sesenta, mientras que los casinos se volvían cada vez más populares, surgieron los primeros jugadores profesionales del blackjack, póker y ruleta. Estos jugadores utilizaban estrategias matemáticas y psicológicas para mejorar su juego. Pero, ¿cuáles fueron las transformaciones que permitieron la llegada de jugadores profesionales? ¿Cuáles son sus estrategias? ¿Cómo es posible convertirse en un jugador profesional?

Las transformaciones de los casinos
La tecnología ha jugado un rol fundamental en la actualización de los casinos. A partir de los años sesenta, los casinos comenzaron un proceso de modernización que continúa hasta hoy en día. Esto puede verse, por ejemplo, en la enorme inversión de las compañías en máquinas tragamonedas. La mayoría de los casinos cuenta con sistemas actualizados y máquinas con una gran variedad de gráficos, sonidos y diversidad de propuestas. 

Indudablemente, los grandes cambios han llegado a través de la revolución digital y el boom de los casinos en línea. Gracias a los enormes avances tecnológicos, las personas pueden acceder a un casino en cualquier momento de la semana, en cualquier momento del día. Esto impacta profundamente en el acceso y amplía el mercado de zonas rurales, alejadas de los grandes centros urbanos. 

Por otro lado, los casinos en línea han ido incorporando diferentes avances tecnológicos, como por ejemplo, el uso de criptodivisas como moneda de intercambio, la incorporación de la inteligencia artificial para el servicio al cliente y la realidad virtual en juegos como la ruleta. Los casinos en línea ofrecen una gran variedad de opciones para los amantes de los juegos de azar. 

Por otra parte, los jugadores profesionales, hoy en día, enfrentan varios desafíos. Al haber mayor acceso al juego, hay más competencia. Una gran cantidad de personas, desde la comodidad de su hogar puede comenzar a jugar de manera profesional. Además, los juegos también se han vuelto complejos. Por ejemplo, el póker precisa de una gran sensibilidad y atención por parte de sus jugadores, así como la ruleta implica el estudio meticuloso de las probabilidades matemáticas. 

Pero, ¿qué es un jugador profesional? 

Algunos definen a los jugadores profesionales como personas que se ganan la vida en los casinos. Sin embargo, esto no quiere decir que se pasan todo el día apostando su dinero. 

Al contrario, lleva mucho trabajo de disciplina, control mental y trabajo duro. En muchísimas ocasiones, ni siquiera se gasta dinero. Sólo se invierte tiempo para aprender a jugar. 

Estrategias para convertirse en un jugador profesional
Generalmente, los jugadores profesionales cuentan con una serie de estrategias que son fundamentales. Algunos de los jugadores que se dedican a esta profesión explican que la disciplina es una de sus mayores aliadas. Respetar la jornada laboral sin la necesidad de cumplir un horario específico no es una tarea sencilla. Sin embargo, con una cuota de pasión es posible lograr cierta disciplina, y sobre todo, cumplir con los objetivos propuestos.

El entrenamiento ayuda a la disciplina y la disciplina ayuda al entretenimiento. Y es que para jugar en serio hay que prepararse y entrenar. Es muy importante conocer las reglas de juego, las excepciones, las mejores jugadas, las tácticas más usuales pero también las más inusuales. Entrenar a diario puede ser agotador pero al jugar se notará la diferencia. 

Si la disciplina ayuda a marcar los objetivos, también ayuda a conocer los límites personales. Pero un límite no es una limitación sino la marca de un recorrido. Es aprender a decir que no si no se está preparado. Es saber decidir cuándo entrenar y cuándo no. Y también aprender a frenar a la hora de apostar. En fin, hacerlo de manera responsable. 

Otro aspecto crucial para cualquier jugador profesional es la organización. Los calendarios generalmente ayudan para anotar fechas importantes. Una vez que se decide en qué torneos se va a jugar, los jugadores se pueden focalizar en momentos específicos y prepararse como cualquier deportista profesional. 

Otra de las estrategias claves de los jugadores profesionales es tomárselo como un verdadero trabajo. Quien desee convertirse en un jugador profesional deberá poder diferenciar sus pasatiempos del juego estrictamente profesional. 

En definitiva, tanto las transformaciones como las nuevas oportunidades en línea han permitido que millones de usuarios puedan acceder a este tipo de entretenimiento. Depende de cada persona saber si solo se quiere jugar por placer o si se desea participar de manera más activa y con mayor disciplina y rigor para convertirse en un profesional de la materia.