España invertirá hasta 12.250 millones de euros en industria de microchips
El Gobierno de España anunció hoy martes una inversión de hasta 12.250 millones de euros (13.140 dólares) en la industria de microchips, como parte de un plan que busca convertir al país en referente en microelectrónica y semiconductores.
Se trata del décimo Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte), bautizado como "Perte Chip", el cual se impulsa gracias a la llegada de los fondos europeos.
Es además el proyecto "más ambicioso" hasta la fecha por su cuantía, su potencial impacto transformador y su posible contribución a la autonomía tecnológica de España y la Unión Europea.
Tras su aprobación en el Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos de España, Nadia Calviño, dijo que el actual presupuesto permitirá generar un efecto "multiplicador" en el conjunto de la economía española.
De acuerdo con Calviño, el Perte Chip se articulará en cuatro ejes fundamentales: el refuerzo de la capacitación científica, la estrategia de diseño, la estrategia de fabricación y la de la industria de fabricación del sector de la información y las comunicaciones.
Explicó que una de las metas del Perte Chip es potenciar aquellas áreas con las que España cuenta con fortalezas, como la investigación de procesadores RISC V (que es una arquitectura de instrucciones de código abierto), la fotónica avanzada, la computación cuántica y su red de salas blancas de micro y nanofabricación.
Primero se buscará el refuerzo de la capacidad científica, al desplegar la investigación, desarrollo e innovación sobre microprocesadores o chips cuánticos, para lanzar una línea de financiación y reforzar la participación en los proyectos estratégicos desarrollados a nivel europeo, indicó.
En seguida, se buscará potenciar la capacidad de España en el diseño de microprocesadores, buscar la dinamización de la industria de fabricación de tecnologías y dedicarse a financiar medidas como la creación de un fondo de chips para escalar las empresas emergentes en expansión.
La mayor dotación irá destinada al eje de la estrategia de fabricación, la cual permitirá construir plantas de fabricación con capacidad tanto inferior como superior a los cinco nanómetros, de vanguardia y gama media, respectivamente.
