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Valeroso ciudadano evitó que anciano se quitara la vida en San Cristóbal

Los hechos ocurrieron en horas de la mañana del jueves, cuando el ciudadano R. Soto Pérez, de 84 años, con residencia en el sector de Campo C, vía a Capacho, en medio de una gran tribulación intentó acabar con su existencia y se disponía a saltar al vacío, cuando un hombre que transitaba por el viaducto se percató de lo que estaba ocurriendo y logró frustrar el hecho

La providencial intervención de un peatón logró salvar a un hombre que intentaba saltar al vacío desde el viaducto de la carrera 21, hecho que fue motivado por la tribulación, de una situación de soledad, problemas de salud y crisis económica, que desde hace algún tiempo está enfrentando la persona que trató de atentar contra su existencia.

Los hechos ocurrieron en horas de la mañana del jueves, cuando el ciudadano R. Soto Pérez, de 84 años, con residencia en el sector de Campo C, vía a Capacho, en medio de una gran tribulación intentó acabar con su existencia y se disponía a saltar al vacío, cuando un hombre que transitaba por el viaducto se percató de lo que estaba ocurriendo y logró frustrar el hecho, reseñó La Nación.

Según lo explicado a las autoridades por el anónimo héroe, iba caminando cuando vio que una persona de la tercera edad tenía la mitad del cuerpo por fuera de la baranda y el muro de protección, por lo que corrió y logró atenazarla, justo antes que intentara saltar.

Con esfuerzo, la mantuvo agarrada, hasta que recibió la ayuda de otras personas y lograron devolverla al andén. Soto estalló en llanto y, en conversación con su salvador y otras personas, contó sobre la difícil situación que estaba atravesando y por la cual había tomado esa descabellada decisión.

El octogenario recibió asistencia por parte de efectivos de la Brigada Motorizada del Cuerpo de Bomberos de San Cristóbal, expertos en asistencia prehospitalaria, que no solo le hicieron una valoración para establecer sus condiciones de salud, sino que lograron tranquilizarlo, informó La Nación.

Soto Pérez ratificó su condición. Les explicó que no tenía familia y se encontraba afrontando problemas de salud, y debido a su precaria condición económica, no contaba con los recursos necesarios para costear tratamiento y adquirir sus medicamentos.

También se hicieron presentes en el sitio funcionarios de la Policía Municipal de San Cristóbal. El anciano fue trasladado poco después a un centro asistencial para ser atendido, clínica y psicológicamente. Del ciudadano que logró frustrar el hecho no se revelaron detalles. Piensa que actuó de la manera adecuada y asumió su acción con modestia. No obstante, merece un gran reconocimiento por haber salvado la vida de Soto, enfatizó La Nación.

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