Sicarios ultiman a reparador de fibra en La Cañada
Se escucharon siete detonaciones, luego los gritos de auxilio de habitantes del sector El Topito, en La Cañada de Urdaneta. Estos se escondieron para huir de las balas. Dentro de la Cooperativa Mixta de Usos Múltiples Don Caña XX, asesinaron a Énder Urdaneta, conocido como “Énder Fibra”, la mañana del pasado martes en la calle principal de El Topito.
Nadie pudo salvar la vida del latonero. Los pistoleros llegaron al lugar en una moto. Mientras uno esperaba, otro descendió del vehículo y disparó en reiteradas oportunidades contra el hombre. Al verlo caer emprendieron veloz huída.
Familiares de “Énder Fibra” llegaron al lugar, que también opera como taller mecánico, y se mostraron herméticos. “Respeten el duelo, no queremos que nos tomen fotografías”, manifestó una fémina a la prensa.
Todos se aglomeraron en la entrada del lugar. La puerta principal estaba cerrada y solo la abrían para que funcionarios ingresaran.
“La Cañada es como vivir en el lejano oeste, aquí te matan y todo sigue igual, para nosotros es sumamente común ver este tipo de hechos. Nosotros escuchamos los tiros, como pudimos cerramos las puertas y ventanas y nos lanzamos al piso. Escuchamos siete detonaciones y luego el sonido de una moto”, aseguró una residente del sector, sin dar su nombre.
La tragedia ha llegado a la familia en dos oportunidades en menos de un año; meses atrás a un hijo de la víctima lo asesinaron en el mismo sector.
“No salen de luto. A este señor hace meses le mataron a un hijo de la misma forma, es trágico todo lo que ocurre acá”, precisó un allegado.
El cuerpo del latonero quedó tendido en medio de dos vehículos, específicamente al lado de una camioneta blanca la cual revisaba para arreglar. En horas del mediodía llegaron los sabuesos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Crimilatísticas (Cicpc), en completo hermetismo, y recabaron todas las evidencias necesarias. Minutos después llegó la furgoneta, para el levantamiento del cadáver y trasladarlo a la morgue.
Investigan las causas del móvil. Extraoficialmente se supo que la muerte por encargo habría sido ordenada por una banda dedicada al robo, sicariato y extorsión.
