Le dan el último adiós a Cardozo como oficial en jefe
Un emotivo homenaje le rindieron compañeros de armas a Jonathan José Cardozo López, de 27 años, el funcionario del Cuerpo de Policía Bolivariana del Estado Zulia caído durante un procedimiento el pasado martes en el sector Tierra Negra. A las 10:00 a. m., llegó el cortejo fúnebre al cementerio San Sebastián, lo escoltaban sus pares uniformados y familiares.
Ocho uniformados bajaron el ataúd. Las mujeres con prendas rojas rompieron en llanto, se acercaba el nal; Jonathan llegaría a su última morada y su asesino sigue en libertad. “Ay Dios mío, ¿Por qué mi hermano?, díganme que se equivocaron y ese no es él”, sollozaba una de las hermanas de Cardozo, mientras era consolado. Todos los presentes se mostraron impotentes ante lo ocurrido con el joven.
Hicieron acto de presencia en el camposanto, el comisario y secretario de Seguridad y Orden Público, Biagio Parisi, el subsecretario Franklin Semprún y el comisionado Marcos Ríos, quienes emitieron palabras de aliento a los familiares del oficial.
La banda marcial José Antonio Paéz entonó las notas del Himno Nacional y Regional, y luego el capellán del Cpbez, Luis Arrieta emitió la liturgia exequial.
Seguido del acto protocolar, Parisi entregó a la pareja de Cardozo la ordenanza donde se ascendía de Oficial Agregado a Oficial en Jefe, por parte de Semprún y Ríos recibió la bandera del estado Zulia. Las mujeres al aceptar el reconocimiento rompieron en llanto y pidieron justicia por lo ocurrido.
El Secretario manifestó la trayectoria impecable de Cardozo y aseguró que no descansarán hasta dar con el paradero de Jhon Kennedy Hernández Mantilla, quien sería el otro responsable de la muerte del uniformado. Hernández Mantilla está en condición de fugado del penal de Tocorón.
Estaba detenido por el delito de homicidio y es buscado activamente por los cuerpos de seguridad. Su hermano Johandry resultó liquidado en el intercambio de disparos.
La familia pidió que se investigue a Perdomo, quien acompañaba a Jonathan durante el procedimiento, puesto que no dio la cara y tampoco asistió al sepelio.
Comentaron que no se explican por qué Jonathan tenía raspaduras en el rostro y además un hombro dislocado. Antes de sepultarlo lo despidieron con seis salvas de honores.
