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Escoltas esperan que el Gobierno regularice sus portes de armas

El Ejecutivo nacional estableció, a través de la Dirección General de los Servicios de Vigilancia y Seguridad Privada, la prohibición a militares y policías de ejercer funciones de custodia. Esto abre una ventana a los escoltas que tienen al menos cuatro años sin el porte de armas vigente

Los escoltas venezolanos esperan que el Gobierno nacional regularice los portes de armas para quienes ejercen labores de custodia de manera privada. En la actualidad, esos permisos para portar armas, herramientas que consideran necesarias para el ejercicio de las labores de vigilancia a particulares o a empresas, no están vigentes.

El coordinador general de la Asociación Bolivariana de Escoltas de Venezuela, región Zulia, Luis Guerrero, informó a Versión Final que en la actualidad están en la búsqueda del porte de defensa a terceros o porte de escoltas, que antes era conocido como porte de defensa personal.

Hace aproximadamente cuatro años, el Ejecutivo nacional ordenó la suspensión de los portes de armas a quienes laboran como celadores privados, en empresas o como acompañamiento a particulares.

Hoy en día, muchos empresarios, ganaderos, se han visto en la necesidad de contratar funcionarios para que hagan ese trabajo, porque nosotros quedamos afectados por el tema del porte", apuntó.

Única asociación registrada

Asegura Guerrero que la Asociación Bolivariana de Escoltas de Venezuela es la única reconocida por el Gobierno y registrada en el país. Precisó que esa profesión está contemplada en la vigente Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y Trabajadoras (Lottt) desde el pasado 16 de febrero de 2018.

Anteriormente el trabajo de custodia no estaba reconocido, nos llamaban guardaespaldas, guaruras, cantidad de nombres nos daban a nosotros, porque la figura del escolta, en la Ley del Trabajo, no estaba contemplada", dijo.

"Desde el 2018 estamos reconocidos por el Gobierno, pero todavía presentamos el problema del porte de armas, que por temas de seguridad el Gobierno tomó medidas de hacer dicha retención (de las armas) y fuimos afectados muchos hombres y mujeres que trabajamos en esta área", aseveró.

-¿Cuántas personas han perdido el trabajo por esa situación?

- Básicamente todos. La gran mayoría ha tenido que emigrar, otros, vender las herramientas (armas) y dedicarse a otras cosas, respondió Guerrero.

En el estado Zulia hay alrededor de 60 escoltas que están legalmente registrados, pertenecen a la Asociación y están acreditados por Caracas, agregó.

Están distribuidos entre Maracaibo, Machiques, Villa del Rosario, Santa Bárbara del Zulia y otras localidades, "en las zonas rurales tenemos escoltas compañeros que están como nosotros en Maracaibo, padeciendo el tema de no poder tener el arma de fuego como herramienta con la que los escoltas pueden hacer el trabajo", señaló.

La Asociación está distribuida en cada rincón del país, en Maracaibo, Barquisimeto, Valencia, Caracas, oriente, Sucre, Tucupita y en general en toda Venezuela, puntualiza.

Prohibición y esperanza

El coordinador de la Asociación Bolivariana de Escoltas en el Zulia mencionó dos normativas emanadas de la Dirección General de los Servicios de Vigilancia y Seguridad Privada (Digeservisp), adscrita al Ministerio de Relaciones Interiores, Justicia y Paz.

Esas normativas contemplan la prohibición, tanto a funcionarios activos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) como a efectivos de los cuerpos de policía, de labores de custodia, acompañamiento, cuidar camiones de alimentos, a particulares y empresas privadas.

Normalmente esos eran los trabajos que nosotros realizábamos. Ellos han venido reemplazando nuestra área en custodia, y todos sabemos que tanto militares como funcionarios policiales están para otras áreas, como seguridad y orden público", refirió Guerrero.

Apunta que la prohibición de labores de vigilancia privada a policías y militares abre a los escoltas una ventana con la que podrán volver a trabajar a plenitud.

Indicó que recientemente consignaron ante la Asamblea Nacional (AN) un documento en el que la Asociación expresó sus argumentos para que sea regularizado el porte de armas destinado estos profesionales de la vigilancia privada.

Insta a los parlamentarios a servir de puente ante el Gobierno para que se concrete la entrada en vigencia del porte de armas para los escoltas, por cuando consideran imprescindible esa herramienta para desarrollar en mejores condiciones la custodia de las empresas y particulares privados.

Guerrero acotó que la Dirección de Armas y Explosivos (DAEX) es la encargada de otorgar los portes de armas y la tramitación correspondiente.

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