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Detenido por abuso sexual a su ahijada de nueve años

El sujeto realizaba el delito lascivo aprovechándose de su autoridad como padrino sobre la niña. El Ministerio Público detalló que la abuela de la menor, encargada de sus cuidados, tenía conocimiento el daño y no lo denunció. Fue la madre de una amiga de la pequeña quien llamó al Cicpc

Un hombre, de 26 años de edad, quedó condenado a 22 años y seis meses de prisión, por su responsabilidad en el abuso sexual de su ahijada de nueve años.

Según la información del Ministerio Público, el sujeto está identificado como J. A. Corredor Tobón.

Por este caso también está acusada D. L. Milagros Uribe, de 49 años, abuela de la víctima, quien al parecer tenía conocimiento de lo ocurrido, pero nunca interpuso una denuncia.

El delito se registró el 20 de mayo de 2022, en una vivienda ubicada en el barrio Las Colinas, jurisdicción del municipio Bolívar del estado Táchira, reseñó Diario 2001.

Según investigaciones del Ministerio Público, para la fecha la víctima se encontraba en casa de una amiga cuando llegó la progenitora de la otra niña.

La representante las encontró nerviosas, por lo que les preguntó qué había ocurrido. Fue cuando su hija le reveló que su amiga era víctima de abuso sexual por parte de su padrino.

La mujer trabajaba en la misma empresa que Corredor Tobón, el agresor de la pequeña. Al notar su actitud nerviosa, el hombre se dirigió hasta la vivienda y tocó la puerta hasta derribarla.

En medio del alarmante encuentro, la menor rompió en llanto suplicando que no la llevaran a casa con su agresor. Fue cuando la mujer llamó y denunció con el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).

Los funcionarios llegaron al lugar y al verificar las circunstancias, el hombre resultó aprehendido en flagrancia. Asimismo, quedó a disposición del Ministerio Público.

En su juicio también fue incluida Uribe, quien según las investigaciones y testimonios se comprobó que, estando a cargo de cuidar de la pequeña, tenía conocimiento del daño que su padrino le hacía y nunca lo denunció, quedando como cómplice.

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