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Cabina del avión ya fue marcada en el Lago: Allí estarían restos de Wolter y Azócar

Alberto Sobalvarro, alcalde local, señaló que "el avión ya está totalmente ubicado en un sitio que tenemos marcado ahí en el Lago, hoy (lunes) llegó desde Caracas una comisión de la dirección nacional de la Policía Nacional Bolivariana y de Protección Civil a hacer las últimas experticias". Se espera que mediante las investigaciones en el lugar del suceso, sean encontrados a la brevedad los cuerpos de Bernardo Azócar y Germán Wolter (padre)

Una comisión de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y de Protección Civil arribó este lunes al municipio Almirante Padilla para continuar con las investigaciones del fatal accidente de la aeronave siglas YV-3296, perteneciente a la familia Wolter.

En una entrevista concedida ayer lunes a Venevisión por el alcalde del municipio, Alberto Sobalvarro, señaló que "el avión ya está totalmente ubicado en un sitio que tenemos marcado ahí en el Lago, hoy llegó desde Caracas una comisión de la dirección nacional de la Policía Nacional Bolivariana y de Protección Civil a hacer las últimas experticias".

Tenemos entendido por los buzos que llevamos el avión o la parte de la cabina del avión, parte del fuselaje, están ahí enterrados", detalló el burgomaestre. Asimismo precisó que "lamentablemente, hasta este momento, no hemos localizado ningún sobreviviente".

Los fallecidos

La mañana de este domingo, fueron hallados los cuerpos de la pequeña Mía Wolter, al mismo momento que sus dos abuelos Federico Wolter (paterno) y Laura Prieto de Homez (materna). Fueron traídos a Maracaibo e identificados mediante estudios genetistas, antropológicos y odontológicos.

De la misma forma, el viernes fueron encontrados e identificados los primeros tres cuerpos: Germán Wolter (niño), Hilda Rincón (esposa del piloto Bernardo Azócar) y Paula Homez de Wolter, hija de Laura Prieto.

Los cuerpos quedaron mutilados tras el fuerte impacto, por lo que el trabajo científico ha sido de suma importancia para la identificación de las víctimas. En un contacto realizado a una fuente ligada al caso, detalló que: "El antropólogo es quien separó los restos humanos localizados y el médico genetista es quien organizó lo hallado, para de esa forma hacer entrega a sus familiares y le den cristiana sepultura".

Se espera que mediante las investigaciones en el lugar del suceso, sean encontrados a la brevedad los cuerpos de Bernardo Azócar y Germán Wolter (padre).

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