A los GNB los “picharon” para robarles sus camiones
El homicidio de Yimi Cantillo, de 50 años; y su primogénito Yimi Cantillo Yendra, de 25, está ligado a la venta de combustible en una “caleta” del sector Juamanca, Guarero, en La Guajira. Padre e hijo se dedicaban al expendio del carburante, por este motivo una banda de ladrones de vehículos planeó asaltarlos para quitarles los dos camiones Chevrolet 350, el jueves en horas de la tarde.
Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) le siguen la pista a un hijo de una mujer conocida como “Rafaela”, quien se encarga de comprar gasolina a los “bachaqueros” en el sitio donde asesinaron a los militares.
En las pesquisas los peritos de la División de Homicidios determinaron que el hijo de “Rafaela” forma parte de un grupo hamponil que se dedica a robar vehículos a comerciantes y contrabandistas, y desde algún tiempo había “fichado” a los efectivos militares.
Solo era cuestión de tiempo para dar el golpe final. La tarde del jueves, cuando los Cantillo procedían a vaciar los tanques de sus camiones 350, de color blanco, placas A11AT6A y A44AG4V, fueron sorprendidos por los antisociales. Seis sujetos armados y con pasamontañas participaron en el hecho, Cantillo padre sacó su arma de fuego e intentó hacerles frente, pero fue superando en número y fue asesinado junto con su hijo.
Mientras tanto en la casa de los fallecidos, ubicada en la calle 99-D del barrio Simón Bolívar, la madre y abuela de las víctimas se preguntaban por qué los mataron de tal forma. Entre lágrimas les pedían a sus parientes que le dijeran que lo ocurrido era mentira. Negaron los nexos de sus familiares con el contrabando.
