Tener una mascota baja las probabilidades de desarrollar una discapacidad
Un estudio del Instituto Nacional de Estudios ambientales de Tsukuba, en Japón, señala que tener a un perro o gato como mascota contribuye a una mejora de la salud física y emocional de las personas.
Hasta en 50 % se reducen las probabilidades de desarrollar una discapacidad física o mental si existe una mascota en el hogar, según demuestra un análisis publicado en la Public Library of Science, una de las bibliotecas científicas digitales más prestigiadas del mundo.
Convivir con un perro o un gato por un tiempo prolongado ayuda a mejorar la capacidad cognitiva, lo cual deriva en una mejora general del estado de salud, así como en disminuir el riesgo de padecer discapacidades, independientemente de los factores socioeconómicos o hasta las enfermedades crónico degenarativas.
El estudio se realizó a partir de las evidencias 11.233 japoneses y será presentado en el próximo encuentro de la Academia Americana de Neurología, el cual se llevará a cabo en abril, en la ciudad estadounidense de Seattle.
"Tener perros parece proteger contra la discapacidad incidente entre los adultos mayores japoneses. Los beneficios adicionales se obtienen cuando el acompañamiento de una mascota se combina con el ejercicio físico regular", señalan los expertos, quienes trabajaron durante 3 años y medio para llegar a estas conclusiones.
El estudio comprobó que una mascota coadyuva a proteger contra el deterioro cognitivo, con lo cual se demuestra una vez que el vínculo entre seres humanos y animales trasciende el aspecto emocional o psicológico.
De acuerdo con la jefa del análisis, Tiffany Braley, investigadora de la Universidad de Michigan, tener animales en casa ayuda a bajar la presión arterial y a disminuir los índices de estrés, tan elevados en las grandes ciudades.
"El cuidado diario del perro puede desempeñar un papel importante en la promoción de la salud y el envejecimiento satisfactorio", asegura el estudio del Instituto Nacional de Estudios ambientales de Tsukuba.
"El análisis de regresión logística indicó que, en comparación con un grupo de referencia de personas que nunca habían tenido un perro, los adultos mayores que eran propietarios de perros tuvieron un indicador significativamente menor de aparición de discapacidad", agrega.
