El diario plural del Zulia

Tres consecuencias del salario mínimo congelado en 130 bolívares

Cuando el salario mínimo se fijó en 130 bolívares en marzo de 2022, eso representaba 74,29% del ingreso mínimo vital. El resto (25,71%) iba de la mano del Bono de Alimentación o como se le llama en la ley “Beneficio de Cestaticket Socialista” por 45 bolívares

La decisión de la administración de Nicolás Maduro de mantener el salario mínimo anclado en 130 bolívares y solo ajustar los montos de las bonificaciones de Alimentación y el llamado bono “contra la Guerra Económica” tiene implicaciones sobre los derechos de los trabajadores en todo el país.

El propio Nicolás Maduro fue el encargado de anunciar el incremento del Bono de Alimentación desde un monto de 45 bolívares hasta el equivalente a 40 dólares a la tasa oficial publicada por el Banco Central de Venezuela (BCV). Mientras que en el caso del Bono de Guerra Económica se fijó en un equivalente a 30 dólares para los trabajadores activos.

Las tres consecuencias más importantes de este anuncio son:

1. Salario mínimo equivale a 7% del ingreso mensual

Casi la totalidad del ingreso mínimo vital recibido por los trabajadores en la Administración Pública ahora está conformado por las bonificaciones adicionales.

Solo 7% del total de este nuevo ingreso mínimo vital corresponde al salario mínimo. Este es el cálculo de sumar todos los renglones de Bono de Alimentación (40 dólares), el Bono de Guerra Económica (30 dólares) y los 130 bolívares (5,24 dólares a la tasa oficial del BCV).

Este anuncio hecho por Nicolás Maduro durante el 1° de mayo rompe con la tendencia de aumentar al salario por encima de los bonos, que se había mantenido durante la era chavista, incluso hasta el año pasado, según Efecto Cocuyo.

Cuando el salario mínimo se fijó en 130 bolívares en marzo de 2022, eso representaba 74,29% del ingreso mínimo vital. El resto (25,71%) iba de la mano del Bono de Alimentación o como se le llama en la ley “Beneficio de Cestaticket Socialista” por 45 bolívares.

Esta nueva tendencia de bonificar el ingreso de los trabajadores hace que el salario pierda fuerza económica y legal. Además, se trata de una distribución que contraviene a la protección del salario que durante décadas los sindicatos, los trabajadores y los juristas defendieron con el establecimiento de un límite o tope de ingreso que se le podía dar a un trabajador a través de la entrega de bonos.

El economista Leonardo Vera señaló que esta política de Nicolás Maduro tiene un componente de discriminación, por ejemplo, para los pensionados del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss) y de los jubilados públicos, que no reciben ninguna bonificación especial para los alimentos y también al fijarles montos diferentes para el Bono de Guerra Económica.

La bonificación de las remuneraciones planteada por Maduro es regresiva y discriminatoria. Regresiva porque un trabajador que gana salario mínimo acumula las pocas prestaciones sobre un porcentaje de su ingreso que es menor al de los trabajadores que ganan más que salario mínimo.

— Leonardo Vera (@LeonardoVera60) May 3, 2023

2. Bono de Alimentación es el mayor ingreso

El Bono de Alimentación dejó de ser un complemento en el ingreso de los trabajadores venezolanos, para convertirse en la parte más grande de su remuneración mensual con este nuevo anuncio de Nicolás Maduro.

A diferencia de la Ley de Programa de Alimentación para Trabajadores que se promulgó en Venezuela en el año 1998, que establecía que esta bonificación especial era un añadido para los trabajadores más desprotegidos en términos de ingreso, ahora esta bonificación pasa a ser el núcleo del ingreso mensual porque equivale a más de la mitad de los 75,24 dólares que se espera perciban cada mes los trabajadores.

Lograr que el Bono de Alimentación sea la porción más amplia del ingreso mínimo vital en Venezuela (53,16%) solo es posible porque en el año 2015, el presidente Nicolás Maduro a través de la Ley Habilitante eliminó la protección que se establecía en la antigua Ley de Alimentación para los Trabajadores para que esta bonificación no excediera 40% del ingreso mensual del trabajador.

3. Vacaciones y utilidades debilitadas

Aquellos trabajadores que contaban con su bono vacacional y sus utilidades para la compra de electrodomésticos o para el pago de viajes a sitios de playa ahora ya no podrán hacerlo.

El cálculo de las vacaciones, por ejemplo, de los docentes en las escuelas públicas o de los profesores universitarios y el resto de los trabajadores de las instituciones educativas a cargo del Estado se hará en base a sus salarios actuales, que no tienen ningún ajuste desde marzo del año pasado.

Los montos entregados a través del Bono de Alimentación o del Bono de Guerra Económica tampoco tendrán ninguna incidencia a la hora de calcular las utilidades en la época decembrina.

Para la firma Síntesis Financiera, la decisión de Nicolás Maduro le permite disminuir las erogaciones fiscales durante julio y agosto próximo, como una fórmula para evitar que se repita el alza del tipo de cambio como ocurrió en agosto de 2022.

Además tiene por objeto atenuar los shocks que causan los fuertes desembolsos fiscales sobre el tipo de cambio y la inflación, como fue el caso del bono vacacional a los trabajadores del sector educación en agosto 2022, que ocasionó una disparada de 37% del dólar en el mes.

Lea también
Comentarios
Cargando...