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OVV: Sensación de mejoría económica es ínfima y genera desigualdad social

Datanálisis vaticina un crecimiento de 12% de la economía al cierre de 2022, y Ecoanalítica dice que el flujo de caja de Pdvsa puede rebasar un incremento de 141%

Ya se sabe que el PIB en Venezuela cayó 80 % en desde 2013 hasta fines del año pasado. A partir de septiembre de 2017, el país entró en una virulenta espiral de hiperinflación, que recién se detuvo en enero de este año, siendo la más alta y dilatada en el tiempo de la región.

A la par, la dolarización de facto. El gobierno de Nicolás Maduro aplicó una serie de tenazas, entre ellas, llevó a 100% -en su momento- el encaje legal para la banca, y logró doblar la rodilla finalmente a la inflación.

¿Venezuela se arregló? No. Está muy lejos de ello, pero sí se ha verificado una cierta recuperación en el foso. Datanálisis vaticina un crecimiento de 12% de la economía al cierre de 2022, y Ecoanalítica dice que el flujo de caja de Pdvsa puede rebasar un incremento de 141%, dados los altos precios del petróleo, producto de la guerra entre Rusia y Ucrania, reseñó Banca y Negocios.

Pero no todo el mundo está tan bien. La encuesta Encovi 2021 refleja 95% de pobreza, y 76.6% de pobreza extrema. Es un crecimiento en el foso, manchado por terribles desigualdades.

Roberto Briceño León es sociólogo, investigador y profesor universitario. Dirige el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV). Y ha sido admitido en la Academia de Ciencias de América Latina (ACAL) recientemente.

Banca y Negocios conversó en exclusiva con el experto para desentrañar este fenómeno de crecimiento y desigualdad, que parece acentuar las diferencias en la golpeada sociedad venezolana.

La sensación de bienestar es algo que el gobierno intenta transmitir, forma parte de su mensaje y del encuadre que tiene que hacer previendo modificaciones que se imponen y deben hacerse el futuro”, apuesta Briceño por una lectura pragmática, de entrada.

“Son pequeños pasos, como devolver el Sambil La Candelaria; es algo simbólico. Esa sensación que está allí produce una mejoría, que todavía es ínfima. Esta especie de pequeño crecimiento produce exclusión y desigualdad social”, expresa Briceño León.

Para ser más específicos, avanza el académico, produce micro desigualdades sociales. Pero, ¿Cómo es esto? “Si la economía cayó 80% en los últimos 8 años es una contracción inmensa. Es alguien que antes ganaba 100 bolívares, y de pronto empezó a ganar 10 bolívares, pero ahora –con esta pequeña alza- gana 15 bolívares”.

¿Qué significa eso? Briceño León lo explica así: “El salario que podía estar en 7 dólares hace 2 años, ahora está entre 25 y 30 dólares. ¿Y qué hace una persona con 30 bolívares al mes?”, se cruza de brazos.

Cuenta que un profesor universitario del más alto escalafón ganaba hasta 20 dólares al mes. Hoy en día está ganando entre 200 y 250 dólares al mes. ¿Hay una mejoría? “Claro que sí. Ahora, ¿Qué son 200 dólares al mes? Eso no da para nada”.

“En el Observatorio Venezolano de la Violencia hicimos una encuesta recientemente: una quinta parte de los hogares recibe remesas. De ese 20%, el 10% las recibe mensualmente; el resto cada dos meses o tres, variablemente. Todos los segmentos mandan remesas. A todo nivel social”, desemboca en un tema crucial para el gobierno.

Mandan los obreros, los campesinos, pero también los profesionales. “Todo el mundo –quiero decir- es clase media y pobres. Los profesores universitarios viven de los hijos que han emigrado”, apunta el entrevistado.

Y pone un ejemplo: “Una familia clase media que vive en Los Ruices. Hay una pareja de señores que tiene una hija afuera que le manda 100 dólares mensuales. Y una vecina no recibe remesa alguna. La diferencia es abismal. Uno come carne y otro no. Uno come pollo y el otro no. Eso mismo sucede en Petare”.

Ahora bien, ¿Por qué Briceño dice que hay algunas mejorías?

“Bueno, las escuelas de Petare están cobrando una mensualidad de 50 dólares. Eso es una platica muy importante para alguien de Petare. Ahora, esa persona puede ser que gana 200 dólares y tiene una hija, le pagan la escuela. ¿Qué sucede con la mejoría que hay allí? La sacó de la escuela pública y la escuela privada le da mejor educación, la maestra buena que estaba en el colegio público se va al colegio privado. Pero quien no tiene esos 50 dólares queda excluido”, topa con la otra cara de la moneda, literalmente.

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