El diario plural del Zulia

Incrementa el índice de gastos con TDC para alimentos

Desde hace poco más de dos años las tarjetas de crédito (TDC) son en un salvavidas para evitar el apremio que provoca la constante inflación a los venezolanos. Es por esto que los ciudadanos han implementado el dinero plástico para adquirir sus alimentos. Con el aumento de salario decretado por el Ejecutivo Nacional, la canasta alimentaria familiar ha aumentado su costo, posicionándose aproximadamente en 400 mil bolívares mensuales, necesitándose un estimado de 25 sueldos mínimos para su compra, según informó el Centro de Documentación de Análisis Social (Cendas).

Esto imposibilita al venezolano común a adquirir los productos de la dieta básica con su salario, viéndose obligado a utilizar este mecanismo.

Luis Bravo, presidente del colegio de economistas del Zulia, destacó que aunque no es el deber ser, las tarjetas de crédito actualmente sirven a los ciudadanos para cubrir las necesidades del grupo familiar. Sin embargo, lo describió como “tapar un hueco para abrir otro”, pues al pagar la deuda, también se presentan los intereses que generan las tarjetas, endeudando más el bolsillo del ciudadano que las utiliza para estos fines.

“Lamentablemente esa es la situación en la que estamos, sobre todo la clase media, quienes son los mas golpeados en la situación económica”, expresó.

La Superintendencia de las Instituciones del Sector Bancario de Venezuela (Sudeban), estimó que en el primer trimestre del presente año, la cifra de lo gastado con tarjetas de crédito en abastos y auto mercados se posiciona en 23 %.

El director de la encuestadora Econométrica, Henkel García, expresó que este rubro es el que tiene más peso en los distintos índices que varían entre ropa y calzado, medicinas, artículos para el hogar, entre otros; y analizó que el porcentaje del trimestre julio-septiembre debía ser más alto, pues la difícil situación económica se ha ido intensificando.

“En los índices registrados del año 2014 –que son los que tienen más antigüedad– esta cifra se posicionaba en un porcentaje del 15 %. Entonces, hemos visto de qué manera ha ganado espacio en el pago con tarjetas de crédito, lo que se gasta en abastos y supermercados”.

En el último trimestre del 2016 Banesco, Provincial, Mercantil y B.O.D representan el 77,7 % de financiamiento por TDC en la banca privada

García estimó este incremento por la caída significativa del poder de compra del venezolano.

“El dinero no alcanza, y de todo lo consumido, lo que se refiere a alimentos y artículos de primera necesidad, presentan más proporción en comparación a otros gastos, ya sean financiados por un salario normal o por tarjetas de crédito”.

Según el portal banca y negocios, en el último trimestre del presente año, Banesco, Provincial, Mercantil y B.O.D, son los que representan el 77,7% de financiamiento por TDC en la banca privada.

comenversionfinal

Solicitudes

Actualmente en Venezuela existen más de 12 millones de tarjetas en circulación, las cuales en gran medida son destinadas por los tarjetahabientes a cubrir el hueco en el presupuesto familiar que está dejando la inflación.

En cuanto a la cantidad de solicitantes de tarjetas de crédito, una fuente que prefirió no ser identificada constató que las bancas privadas se presentan actualmente como la mejor opción para quienes deseen obtenerlas y que las solicitudes en este sector bancario se mantienen, por la facilidad del proceso. Mientras los clientes cumplan con las políticas de balances personales, esto será posible. 

El proceso de solicitud consiste en evaluar los requisitos de la persona natural o jurídica.

“Estos se resume en algunos recaudos y datos socioeconómicos de la misma, que influirá en su elegibilidad para obtener la tarjeta”.

Por otra parte, la fuente agregó que las oficinas bancarias encargadas de la distribución y asignación de las tarjetas de crédito, cuentan a diario con una gran afluencia de solicitantes o clientes bancarios que asisten para retirarlas, lo que demuestra que cada vez, son más los ciudadanos que desean obtener la posibilidad de pagar distintos artículos mediante este mecanismo.

Sobre esto, el economista Alberto Castellanos, sustentó que, sin duda, algo que aún sigue siendo económico en Venezuela es el acceso al crédito.

23 es el porcentaje que presentó el gasto para alimentos con TDC en el primer trimestre del año 2

“A pesar de que ya para los venezolanos no tiene ningún sentido ahorrar, definitivamente tiene mucho sentido endeudarse, porque la tasa de la deuda (29 %) está muy por debajo de la tasa de inflación (por encima del 500%) entonces habrá un incremento en los créditos”.

Sin embargo, expresó que esto se debe a que la liquidez que existe en la economía está decreciendo en términos reales y se corre con el riesgo de que se haga un reajuste en las tasas de interés.

“El poder de compra es cada vez menor, entonces, este acceso al crédito, a pesar de que aún es favorable, va a ir disminuyendo paulatinamente junto con el poder de compra”.

Por otra parte, las peticiones en la banca pública son un poco más difíciles de completar con éxito, por las restricciones que se han impuesto.

Bravo comentó, que estas limitantes se deben a la escasez de plástico para elaborar las tarjetas o a la posibilidad de que este sector esté intentando disminuir la masa monetaria en el público con los fines de no influir aún más en la inflación.

“Los bancos argumentan que la falta de materia prima es la que los imposibilita para distribuir las tarjetas de crédito a los nuevos solicitantes, pero mientras más masa y posibilidad de comprar exista, más presión se presenta en los índices inflacionarios. Hay menos bienes y servicios pero sigue existiendo la presión de personas con bolívares y con tarjetas de crédito con capacidad de compra, por lo tanto habrá inflación o especulación”.

Lea también
Comentarios
Cargando...