Faltan 434 millones de billetes
La sombra fantasmagórica de la crisis de finales de 2016 se cierne sobre los venezolanos. Cada vez hay más denuncias de escasez de efectivo y de mayor restricción para cobrar en los bancos.
Entrando al último cuatrimestre del 2017, expertos sostienen que el Ejecutivo no dispone de 800 millones de dólares requeridos para terminar de complementar el número de billetes que hace falta, para establecer definitivamente el nuevo cono monetario.
El doctor y analista financiero Orlando Zamora revela que al cierre de agosto, la masa de billetes que se encuentra en circulación supera los 30 billones de bolívares: “Es una cantidad fabulosa, 30 con doce ceros a la derecha, solo que son billetes del viejo cono, de baja denominación, ya rechazados en su mayoría y el inmortal billete de 100”.
El presidente Nicolás Maduro ha prorrogado nueve veces la salida de circulación del billete de 100. Ese solo hecho, expresa Asdrúbal Oliveros, directivo de Ecoanalítica, revela un grave problema de liquidez y de emisión de dinero inorgánico.
“¿Por qué no termina de estabilizarse el nuevo cono? Porque se requieren muchos más billetes y para ello, una cantidad en dólares de la que el Estado no dispone”.
¿Improvisación?
El doctor Zamora, quien por mucho tiempo fue funcionario del Banco Central de Venezuela (BCV), argumenta que el Gobierno nunca fue claro respecto de las razones que justificaban el cambio de cono monetario: “La circulación de piezas del nuevo cono, actualmente, representa solo el 4% de todos los billetes que están circulando, hay un déficit significativo”.
Zamora recalca que Nelson Merentes, antiguo presidente del BCV, ordenó a destiempo la impresión de billetes de 10.000 y 20.000 bolívares: “La circulación de las piezas de 500 y 1.000 bolívares –del nuevo cono– representa el 30% de la circulación, mientras que la circulación del de 100 está en 45%”.
“Apuraron la medida en 2016 por una crisis que el mismo Estado propició en frontera y luego no calcularon bien el número de piezas y fechas de ingreso para aplicar el cono. El cono fue aplicado sin tener las piezas en la mano”.
Más vida que un gato
Zamora asegura que el anuncio de sacar el billete de 100 desde siempre fue un engaño, por lo anteriormente expuesto: “Para sacar el billete de 100 tenías que tener el circulante de las nuevas piezas completas, incluyendo las monedas y eso aún no ha pasado”.
Los economistas concuerdan en que la demanda se tragó la cantidad de piezas impresas.
“Más de 15 entregas de 5.000 millones de billetes nuevos en 10 meses es la cifra que da el Gobierno, entonces ¿por qué aún no alcanza? porque la inflación se traga cualquier intento toda vez que ya estamos a niveles de hiperinflación, los precios suben por ascensor y la emisión de billetes nuevos por escaleras, sumando esta distorsión a la fuga de efectivos vía contrabando por la frontera y a la falta de control de estas prácticas”.
“La masa de efectivo debería crecer con la inflación. En el pasado, el 12% del efectivo que circulaba estaba en manos de la gente, actualmente, apenas 7,5% del efectivo disponible está en manos de la gente”, destacó el director de Econométrica, Henkel García.
El cálculo hecho por Econométrica es el resultante de la liquidez proyectada al cierre de este mes que transcurre, y la demanda de circulación de papel moneda respecto de ese cálculo, según explica Henkel García.
“Tomando en consideración la liquidez proyectada al cierre de agosto, exige que haya en circulación papel moneda equivalente a Bs. 4.388 billones, unas 836 millones de piezas del nuevo cono monetario. No obstante, las cifras del BCV demuestran que a la fecha se mueven 522,3 millones de billetes en la economía, es decir, hay un faltante de 434,4 millones de piezas para equilibrar la liquidez con el efectivo”.
El analista subraya que “la crisis de efectivo no llegó sino hasta que este dejó de alcanzar para pagar las pensiones, específicamente para diciembre de 2016, por lo que puede concluirse que una crisis de efectivo reclama no solo un deterioro del ratio efectivo sobre liquidez, sino también un desplome del poder de compra del efectivo como el observado desde 2006”.
Sudeban y las mafias
Como consecuencia de la crisis de efectivo y las restricciones para sacar dinero en cajeros y taquillas bancarias, mafias se aprovecharon para vender billetes bajo la modalidad del avance de efectivo, cobrando altos intereses de comisiones (de 15% a 40%).
La Superintendencia de Instituciones Bancarias (Sudeban) emitió una orden de prohibición a toda la banca y establecimientos comerciales de realizar estos avances e iniciaron investigaciones. Ayer, la Sudeban desmintió que se haya “limitado los montos para retirar o transferir dinero a través de los canales de atención”.
“Existe una economía subterránea liderada por mafias del dinero, que han ganado espacios con fines lucrativos, lo que pone en riesgo la estabilidad de la economía del país”, declaró el superintendente de bancos Antonio Morales hace una semana, cuando se agudizó la crisis de efectivo.
El funcionario remarcó que la Sudeban investigará a comercios y bancos sobre los cuales recaen denuncias sobre estos ilícitos.