El diario plural del Zulia

Comprar teléfono inteligente se vuelve una misión imposible

Alex Lamus se encontraba tras el mostrador del local que atiende en la planta baja de Galerías. A su lado, un teléfono marca Blu desarmado, los seis diminutos tornillos dentro de una carcasa y dos pequeños botones a un costado: “Se le pega el botón de encendido, hay que cambiarlo”, explicó y agregó: “Al menos esto todavía se consigue y no es tan caro”. Lamus sentenció ante la pregunta: “¿Qué tenéis y a cómo? Pura pacotilla, nené, baraticos, a 90 mil, las ventas han caído en un 70% por falta de inventario”.

Es la realidad de comprar un teléfono celular en Venezuela. Entre 200 mil y cinco millones de bolívares oscilan los precios de los teléfonos inteligentes, ello dependiendo de la marca y modelo del Smartphone, una circunstancia que genera frustración en la población, tomando en cuenta, que disponer de esta tecnología es prácticamente una necesidad.

El Centro Comercial Galerías, en Maracaibo está abarrotado de tiendas de celulares, pero solo cuatro ofrecen el Samsung S7, de 32 GB en Bs. 3 millones 600 mil, mientras el Iphone 7, con la misma capacidad de memoria, se valora en Bs. 4 millones 800 mil. En Sambil y Lago Mall, los precios se elevan.

El salario mínimo en el país se ubica en 65.021 bolívares. Si se suma el valor del cestatique, considerando que sea cancelado en efectivo, como lo decretó el Presidente de la República, el salario se redondea en 200.021 bolívares, que no alcanzan para comprar el más barato de los celulares inteligentes.

Un equipo Blu Studio 4.0 alcanza el valor de 280 mil bolívares, es decir más del salario mínimo mensual. Otras marcas ofrecen precios más elevados: El Sky Platinum 5.0 cuesta Bs. 380 mil y el Blu Studio C HD vale Bs. 416 mil, el venezolano de clase media tendrá que mirar hacia los “potecitos” o peor aún, desempolvar los “dinosaurios”.

Alternativas

La página Mercado Libre siempre ofrece variados modelos y precios, algunos de los cuales pudieran adaptarse al bolsillo y solo al hecho de que el dispositivo sea concebido con su uso básico, es decir, llamadas y mensajes. No obstante, hay ofertas de equipos nuevos y usados que por modelo y marca podrían representar una solución.

Un Samsung S 3.600, de tapita, puede costar Bs. 87.900; Un Samsung G3 pantalla grande, doble sim, con cámara, puede hallarse en 92.900; Un Nokia 108 doble sim, se localiza en 72.000 bolívares; mientras el Plum doble sim, Hero Básico se valora en 81.500 bolívares, estos últimos no son equipos inteligentes.

Desempolvando

Julio Mavárez es conserje del conjunto residencial Valle Claro, su alternativa fue revivir el desechado: “Para el hijo de uno es complicado por un tema de estatus, si le habilito un Patagonia me dice que se burlan de él, pero yo en cambio no le paro, le quité a un vecino un Motorola V-3 que tenía encajonado por allá en una gaveta, lo activé y ese me sirve”.

Mavárez recuerda haber tenido su Vergatario, teléfono ensamblado en Venezuela por la empresa socialista Vetelca, compañía que tiene varios años sin producir dispositivos. “Eso me dijeron cuando pregunté por él, esa flor ya no retoña”. El caso es que comprar o reparar un móvil resulta una calamidad.

La odisea

Gerson Montilla atiende un local que vende y repara dispositivos. Explica que la razón por la cual ha disminuido significativamente las ventas y la adquisición de equipos es el tema de las divisas. “Debemos comprarlos a precio de dólar paralelo ¿cómo entonces los vamos a ofrecer como si los hubiésemos comprado a dólar preferencial? No es negocio, no resulta”.

Tal circunstancia eleva el auge de los negocios de reparación o repotenciación de celulares y la mayoría de los clientes desempolvan sus “petacos” desechados hace un tiempo, tras poder –con sacrificio- adquirir el teléfono de vanguardia. “Volvimos a la era de los dinosaurios, ahora tu vez gente con V-3, Patagonias, Nokias de esos viejos y hasta los Motorola que ya no se veían, no queda otra que activarlos y ello amerita negocios capaces de revivirlos y eso es lo que aquí hacemos”, argumentó César Iriarte, propietario de un local de reparación en Galerías.

Iriarte inició vendiendo equipos Blu, Huawei, LG a falta de capital para traer Samsung y Iphone. “Pero hago más reparando. La mayor parte de clientes vienen para cambiar el pin de carga, el cual oscila entre los 12 y los 15 mil bolívares, dependiendo el equipo”.

Sobre las ventas, Iriarte aseveró que “todo depende de la época. Para el Día de las Madres logré vender seis S3-Mini, esos valen 200 mil bolívares, pero de ayer para hoy no he vendido uno solo y he reparado tres”.

En cuanto a los repuestos, el propietario asegura que los de Samsung son los que más se consiguen: “De LG y Huawei nada, entonces toca al cliente comprar caro un equipo malo y desechado, para poder acceder a equis repuesto, es triste”.

Telefonía sufriendo

Las empresas de telefonía celular como Digitel, Movistar y Movilnet, hacen malabares para subsistir. Alejandra Budjak se encontraba sola en un agente autorizado Movistar de Galerías. Lo que mostró al preguntársele por lo que ofrecía fue un equipo marca Yezz que están ofertando en Bs. 95 mil, con la promoción pospago, línea, plan y tarjeta sim card gratis.

“Estamos lejos de volver a tener los anaqueles full de equipos como hasta hace poco, no hay inventarios, los equipos inteligentes están incomprables y no hay suficientes dólares para pagar por ellos al precio del paralelo”.

Lea también
Comentarios
Cargando...