El diario plural del Zulia

Caso Rosales: Una lucha librada en tribunales

“Ya negociaron algo”. Comentarios como ese, que sugieren acuerdos bajo la mesa con el Gobierno, gravitaron —junto con el júbilo— alrededor de la medida de casa por cárcel dictada el miércoles en la noche a favor de Manuel Rosales, líder de Un Nuevo Tiempo (UNT) y exgobernador del Zulia.

Para la defensa, sin embargo, la historia se aleja de la grandilocuencia política. Sus abogados, desde 2009, habían planteado en el expediente que, por la naturaleza de las acusaciones en su contra, Rosales tenía que ser juzgado en libertad.

El supuesto delito de enriquecimiento ilícito nunca fue de tal gravedad como para mantenerlo preso, en opinión de Ney Molero, abogado y asesor técnico del equipo de defensores.

“Desde hace un año, en el expediente les planteamos al tribunal que él se venía a poner a derecho y le solicitamos las medidas sustitutivas que le corresponden de acuerdo a la ley. La medida de prisión, en las condiciones que se le impusieron, no tenía justicación. Más aún cuando en la audiencia preliminar, la única acusación que quedó en el expediente fue el supuesto enriquecimiento ilícito por 140 mil bolívares, que es una minucia, y de lo que no hay pruebas”.

Cuando se distribuyó el expediente y se decidió que en el Tribunal 12 de Juicio se iba a efectuar el juicio oral y público, los abogados volvieron a solicitar la medida sustitutiva, que finalmente se le concedió a Rosales.

“Después de tantas veces que nos la han negado, la acordaron. Si detrás de eso hay algunas otras intenciones o una orden superior, no tenemos conocimiento alguno”.

La buena fe

“La buena fe se presume y la mala hay que probarla”, comenta José Luis Pirela, diputado de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), en respuesta a quienes pretendan calificar a Rosales y sus allegados de “negociantes” con el oficialismo.

Y fue Pirela quien, en 2004, entonces chavista y militante de Patria Para Todos (PPT), denunció a Manuel Rosales por la supuesta adquisición de bienes por parte del líder de UNT con fondos de la Gobernación. Caso que la Fiscalía desechó.

“Quienes conocemos a fondo el proceso que se le sigue a Rosales sabemos que ese juicio lo venían sosteniendo sólo con los elementos de una patraña que montó el exmagistrado Eladio Aponte Aponte”.

El exfuncionario, ahora en el exilio, confesó por escrito el año pasado cómo habían enjuiciado al dirigente opositor sin pruebas.

“Demostré, con una confesión que hizo Aponte Aponte desde el exterior, en la que reconocía que se había hecho un montaje de una grabación donde pretendían relacionar a Rosales con una serie de bienes en el exterior que no estaban en los documentos iniciales de la investigación, que formaban parte de una patraña en la que a mí trataron de involucrarme y me negué”.

Pirela cree que la medida sustitutiva, aunque es humanamente mejor que estar en una cárcel, obliga a Rosales a establecer domicilio en Caracas y no el Zulia. “Es una medida del Gobierno para despresurizar los reclamos que hay alrededor de la libertad de Rosales. Y lo que hicieron fue similar al caso de Antonio Ledezma y Daniel Ceballos, a quien después le revocaron la medida. Lo mantienen apuntado, porque una medida de casa por cárcel es tenerlo en tres y dos. Pero eso forma parte de las crueldades de un Poder Judicial rojo y de una democracia peregrina como la que vivimos”.

Organizarse

La medida sustitutiva en beneficio de Rosales también será provechosa para UNT, cuyos dirigentes ahora podrán tener una comunicación más fluida con su líder para reorganizarse y tomar impulso con renovadas fuerzas, de acuerdo con Luis Aguilar, politólogo y experto en análisis de escenarios.

“Rosales representa la columna vertebral de su partido. A través de ese beneficio judicial él puede reunirse con los principales dirigentes para dar las directrices políticas, organizacionales y electorales de forma más eficiente”.

Que le concedieran el beneficio de casa por cárcel sin duda es asombroso, dada la relevancia del dirigente, opina el experto, pero descarta que se deba a una negociación truculenta con sectores del chavismo.

“Recordemos que en San Cristóbal el Sebin detuvo a un concejal de Voluntad Popular y le sembró granadas y material militar. A lo mejor el Gobierno benefició a Rosales para cubrir un poco la matriz de opinión represiva que pesa sobre el Estado. Rosales es un líder con buena gestión aceptación en el Zulia. Y creo que le aporta mucho a la democracia venezolana”.

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