Ismael Mercado | Volver al pasado
Jamás te quejes de lo vivido en el pasado, lo que viviste te hace ser quien eres
Filosofando sobre la vida y conversando con varias personas, he escuchado en repetidas ocasiones la frase: “todo tiempo pasado fue mejor”. Me han dicho que quisieran volver al pasado para encontrarse con su “yo” de hace diez años y decirle que evite tantos errores, otras viven del resentimiento de lo ocurrido con amigos, familia y parejas, en resumen, llevan tanto pasado encima que no tienen tiempo para vivir el presente y crear un mañana diferente.
Otros, ( yo, inclusive) viven queriendo que el mañana llegue, que el proyecto que están armando se concrete, y nos perdemos de vivir el proceso, hasta en ocasiones queremos que las situaciones se solucionen sin tomar una decisión o acciones en pro de nuestros objetivos. Acá, insisto con la pregunta que ya es un cliché ¿usted tiene algún objetivo de vida?
Con el tiempo he entendido que la vida es un conjunto de experiencias, y que depende de cómo las asimilemos tendrán un impacto negativo o positivo en la vida; que podemos saber o creer que sabemos mucho, pero si no somos capaces de llevar a la práctica lo que sabemos, hemos perdido el tiempo.
Mientas la vida transcurre vamos dejando atrás:
Muchas personas, con unas perdimos el contacto, otras decidieron salir de nuestras vidas y algunas fallecieron; también han aparecido nuevas que nos han enseñado a caminar nuevos senderos.
Muchos años, que nos han dejado arrugas, kilos de más, menos cabello, cuentos e historias, a veces mal contadas, metas y objetivos por lograr para continuar viviendo como un joven pero con la experiencia de un adulto.
Deudas, en amistad, amores y quereres. Vivimos tan deprisa que callamos lo obvio, y por obvio lo olvidamos, pareciera que vamos perdiendo la sensibilidad de decirle a la gente que tenemos cerca cuánto la queremos, y malgastando cada oportunidad de tener algún detalle.
De mirar al pasado he aprendido que “ la tragedia se vuelve comedia con el tiempo” y que muy pocas cosas merecen que perdamos el sueño.
Hoy, mi querido lector, lo invito a que tome una hoja de papel y lápiz y escriba la biografía de la persona más importante que existe, recuerde resaltar sus tristezas, alegrías, logros y proezas, luego que la termine, léala en voz alta tomando en cuenta que la persona más importante es usted, que ese pasado con sus aciertos y derrotas es el responsable de que hoy se encuentre aquí, de pie, vivo, tome ese pasado como trampolín para ir por lo que quiere, deje de mirarlo como una atadura, tome su parte y hágase responsable para reconocer que mucho de lo que pasó usted lo permitió.
El pasado nos llena de nostalgia, nos ahoga de recuerdos, nos brinda el miedo de perder, pero cuando lo miramos con valor y esperanza se convierte en el pilar de mejor presente.
¿ Volvería al pasado?
