Reina Máxima pide bajar inflación para dotar de crédito a pobres en Argentina
La reina Máxima de los Países Bajos dijo este miércoles durante su visita oficial a Argentina que una de las principales razones por las que los sistemas de microcréditos no funcionaron en su país natal fue la alta inflación, que anula la posibilidad de ahorro a las poblaciones más pobres.
En la recta final de su visita al país austral y después de una extensa reunión con el presidente argentino, Mauricio Macri, en su residencia oficial de Olivos, Máxima repasó en una conferencia de prensa los principales déficits que afronta la sociedad en materia de inclusión financiera.
"Sólo el 50 % de la población tiene acceso a una cuenta bancaria, y esa figura cae al 44 % cuando uno mira a la gente con bajos recursos", repasó la reina, quien señaló que los ahorros personales representan sólo un 15 % del producto interior bruto (PIB), un dato que en la media del resto de países de la región asciende al 41 %.
En la misma línea que en la charla que pronunció ayer en la Universidad Católica Argentina (UCA) ante medio millar de alumnos y profesores, la reina consorte de Holanda pidió al gobierno y al sector privado que trabajen para mejorar la inclusión financiera de la población de su país natal.
Máxima, que ayer señaló el lento crecimiento económico del país y recordó que un tercio de la población vive en la pobreza, observó en la conferencia de hoy que los sistemas de microcréditos para dotar de financiación a las clases más bajas del país no funcionaron en el pasado en Argentina por la inflación.
"Es necesaria una estabilidad macroeconómica para otorgar microcréditos y para poder, por ejemplo, ahorrar en un banco sin perder el valor de la plata con el paso del tiempo", ahondó la monarca, quien consideró que "es caro ser pobre".
Opinó, en esta línea, que dejar fuera del sistema de financiación a los sectores más vulnerables es lo que realmente "los mete en la pobreza".
Máxima estuvo acompañada en la conferencia por la vicepresidenta del gobierno argentino, Gabriela Michetti, su último acto antes de volver a Holanda y concluir la visita a Argentina que realizó durante ayer y hoy como asesora especial del secretario general de las Naciones Unidas sobre Inclusión Financiera para el Desarrollo.
Como parte de ese periplo, esta mañana se reunió a puerta cerrada con el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, con el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, y, finalmente, con Macri en Olivos pasado el mediodía.
A todos ellos les transmitió que Argentina contará en este camino con el apoyo técnico de los organismos multilaterales, como Naciones Unidas y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y que el país tiene su apoyo para presidir el G-20 en 2018.
Tras su aterrizaje ayer en el país, se reunió con seis ministros del Ejecutivo argentino y con los titulares del Fisco, del Banco Central y del estatal Banco de la Nación argentina para hablar sobre el desarrollo de la inclusión financiera en el país austral.
Además, disertó sobre todos estos asuntos en la UCA, donde se licenció en Economía en 1995.
Nacida en Buenos Aires en 1971, la esposa del rey Guillermo completó hoy la tercera visita oficial a su país de origen en menos de 15 años, después de haber viajado en 2005 y 2008 también como asesora especial de la ONU.
Antes de abandonar Argentina, aprovechó para felicitar al gobierno, que, entendió, "ha hecho muchísimo desde diciembre para acelerar la inclusión financiera", aunque pidió que se prolonguen estas políticas para que el país pueda crecer en este aspecto y equipararse así al resto de la región.
Aplaudió también la regularización de la información de los datos económicos que implementó el Ejecutivo de Macri a comienzos de año, cuando restableció los informes del Índice Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), suspendidos por el anterior gobierno: "La data es fundamental para mejorar las políticas financieras".
"Argentina tiene la posibilidad de hacer muchas cosas que países como Holanda y Estados Unidos ya han hecho".
