Petro y Cortizo trataron sobre la migración irregular por el Darién
El presidente colombiano Gustavo Petro se reunió este martes en Nueva York con su homólogo panameño, Laurentino Cortizo, para hablar sobre la situación que viven miles de migrantes diariamente por atravesar el tapón del Darién, que separa Colombia y Panamá. Este último país ya ha acusado al gobierno neogranadino de no tomar acción ante la crisis.
Petro contó que la propuesta que recibió por parte de Panamá fue poner una serie de retenes a lo largo de la tupida selva que compone el Darién y por donde han pasado ya más de 350.000 personas y cerca de 40.000 niños, según Unicef.
No nos parece eficaz”, contó Petro. Junto con el presidente de Panamá acordaron tener una reunión más formal para abordar la problemática que afecta a las dos naciones, reseñó El Espectador.
La postura del jefe de Estado colombiano sobre este flujo migratorio ilegal ha estado centrada, sobre todo, en atacar los problemas de raíz que llevan a las personas a desplazarse. “Acordamos centrarnos en cómo humanizar. Panamá habla de ordenar, nosotros de humanizar y que no muera la gente”, dijo.
Además, aseveró que se está tratando de ver cómo avanzar en el diálogo con Estados Unidos en términos de los trámites del visado. “Queremos avanzar mucho más. Ni siquiera debería haber visa”, afirmó Petro. Mientras unos hablan de derribar fronteras, otros buscan delimitarlas aún más. Esta semana el gobierno estadounidense desmintió al jefe de Estado de Colombia sobre la supuesta petición de construir un muro que reprimiera el tránsito de personas a través de la selva.
Por otra parte, el presidente neogranadino aseguró que los venezolanos representan un 80 por ciento del flujo que se dirige hacia Estados Unidos vía Darién y la solución, a juicio de Petro, pasa por aliviar la presión económica sobre Venezuela, a saber, "liberar fondos de manera progresiva", publicó la agencia Sputnik.
Hemos pedido que a través de la Corporación Andina de Fomento se permita tramitar los dineros propiedad de Venezuela en el FMI (Fondo Monetario Internacional), los llamados derechos especiales de giro, por una cuantía de 5.000 millones de dólares para empezar a lograr un mejor bienestar de la población en Venezuela, que es lo que permitiría disminuir sustancialmente el flujo del Darién”, dijo el gobernante colombiano.
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