OMS pide prohibir el uso de vapeadores en el mundo
Ante la posibilidad de adicción y problemas respiratorios, la Organización Mundial de la Salud exigió a los diferentes países del mundo prohibir los vapeadores que son usados especialmente por la población joven, y extendió esta alerta a los cigarrillos electrónicos.
Esta entidad de salud de reconocimiento internacional publicó una comunicación en la que pidió a los gobiernos alrededor del mundo que implemente restricciones a los vapeadores para proteger la salud de la población mundial, especialmente la joven.
Pese a que popularmente se cree que los cigarrillos electrónicos y vapeadores permiten la reducción de riesgos y daños de los cigarrillos, lo cierto es que la OMS advirtió que estos dispositivos pueden causar daños de salud a largo plazo, reseñó El Colombiano.
Si bien no se comprenden completamente los efectos a largo plazo, se ha establecido que generan sustancias tóxicas, algunas de las cuales se sabe que causan cáncer y otras que aumentan el riesgo de trastornos cardíacos y pulmonares”, expuso la OMS en su comunicado.
El director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, solicitó a los gobiernos y autoridades de salud que se garantice la prohibición del uso de este tipo de dispositivos de vapeo en la población menor de edad, pues se exponen a sufrir consecuencias por la inhalación del vapor y podrían quedar enganchados con la nicotina.
“Los niños son captados y atrapados a una edad temprana para usar cigarrillos electrónicos y pueden engancharse a la nicotina“, destacó Tedros Adhanom Ghebreyesus al advertir que estos dispositivos implican serios riesgos de salud.
Sobre las posibles afectaciones de salud, la OMS detalló que se podría generar un daño cognitivo que puede afectar el proceso de aprendizaje y también podría representar riesgos para los fetos. También se destacó que podría generar problemas cardiovasculares.
La OMS no puede interferir en la legislación de cada país, pero con este tipo de pronunciamientos entrega directrices para tratar de que las autoridades de salud de cada país se encarguen de prestar atención a este potencial riesgo.
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