María Guerrero, la trotamundos que fundó un club de lectura para la compasión en Chile
Profundidad. Autoconocimiento. Altruismo. La historia de María Guerrero es la de una venezolana que ama la lectura, que aborda la reflexión y la comprensión como herramientas para potenciar la empatía.
Guerrero es farmaceuta, coach ontológico y especialista en gestión emocional. Nació en Trujillo, pero es de Pampan. Vivió en Caracas, Sarajevo, Nueva York y Viena. Su esposo es diplomático austriaco.
Llegó a Santiago hace 5 años y allí fundó el Huerto del Lector (@huertodellector), club de lectura nacido en pandemia en el que comparte aprendizajes y es, además, una herramienta de autodescubrimiento que le da la oportunidad de mostrarse en la faceta de facilitadora.
María necesitaba incluir la lectura como habito en su vida -era super dispersa y le costaba atravesar la barrera cognitiva- y, pensó que acompañada le iría mejor. Lanzó un comentario en el cierre de un taller online e inició un viaje que lleva tres años funcionando de manera gratuita.
Necesitaba comprimir lo aprendido estos años fuera de Venezuela. Desde aprender inglés, croata y alemán, hasta ser autónoma en mi rol como mujer”, asegura quien desde pequeña soñaba con aportar algo al mundo, pero no sabía cómo hacerlo. Esa búsqueda la llevó al Coaching.
Libres de juicios, y guiados por María, su comunidad se reúne con ella vía online para intercambiar opiniones, compartir recomendaciones y celebrar el placer de leer. “Huerto del Lector me da la oportunidad de conectarme. Es muy gratificante escuchar las historias, hacer humanidad compartida, no sentir que solo a mí me pasan las cosas sino también escuchar”, sostiene.
Guerrero inició vía online el Programa “Dale Compasivamente”, entrenamiento práctico en el que puedes desarrollar tu potencial cuidador, capaz de crear ambientes cálidos y transmitir con determinación y amabilidad tus necesidades, ideas y propósito. “Sueño que las personas tengan una vida plena y más amable, que los procesos y desafíos no los lleve a lugares oscuros y los estanque, sino que puedan enfrentarlos con valentía y mucha compasión”.
