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La historia de "Beto" Hernández: De comenzar limpiando pocetas a conducir programas en la TV chilena

Amado u odiado por un sector de la colonia venezolana en Chile, pero siempre exitoso. Luis Alberto “Beto” Hernández sigue llenando de hitos su historia de vida como migrante en Santiago y acaba de firmar contrato con TV +, canal chileno en señal abierta, donde conducirá Viva América, programa que resalta la interculturalidad.

Lo hará junto con Cristina Ugarriza, de Colombia, e Iris Gálvez, de Perú, y bajo la producción general de Paulo Galleguillos, creador de Chilezuela.

“Estoy feliz. Mis expectativas son muy grandes. TV + es un canal que llega a todo Chile y cuenta con una maravillosa audiencia. Tiene además muchísimo auge, con conductores de gran trayectoria que son parte de este canal y eso es un plus para alguien como yo que apenas va comenzando”, detalla.

Pero “Beto” tiene una historia de superación increíble.

Asesor de políticos

Nació un 30 de agosto en Maturín, estado Monagas, donde se graduó como ingeniero industrial, carrera que ejerció por un año, antes de dedicarse al marketing político. “Asesoré a dos dirigentes opositores, con quienes logré el objetivo: uno fue alcalde y la otra diputada a la Asamblea Nacional. Yo estuve con el manejo de redes sociales. Ese fue mi inicio como creador digital”.

Emigró solo a Chile en 2016 y se quedó 15 días en la sala del departamento de un amigo. Quince días después, pudo alquilar una habitación. “Dormí en el pisco como 15 días, hasta que llegó mi hermana como al mes y compramos un colchón inflable”, recuerda. Su primer trabajo, a 5 días de llegar, fue en el área de limpieza.

“Comencé lavando pocetas y limpiando en un local de ventas de completos. En esos días llegué a pasar hambre”, confiesa.  Recuerda las propinas en ese restaurante, que se dividían entre cuatro trabajadores por turno.

“Con poco más de 1000 pesos que solían quedarme solía comprar (pan) ayuyas y un sobre de Tang.  Cuando uno inicia desde cero y pasa por ese tipo de situaciones, valora más las cosas”, afirma. Luego trabajó como asistente de cocina, aunque no sabía cocinar. También laboró como garzón.

Influencer

Como creador de contenidos, “Beto” se abrió paso subiendo, inicialmente, fotos de paisajes.

“Chile siempre me ha parecido bellísimo”, asegura. Con el tiempo empezó a exponer como vivía su proceso migratorio y eso generó que la gente lo viera como una referencia para tener información sobre cómo llevar su proceso. “Yo iba a Migración a sacar el RUT y yo narraba cómo era mi experiencia. Eso gustó muchísimo”.

Así, comenzó a referirse a sus experiencias al viajar o disfrutar en algún lugar y la conexión con la gente se disparó para darle vida inicialmente Un venezolano en chile, una cuenta que retrataba su cotidianidad y daba detalles sobre los procesos migratorios de los que absorbió conocimientos, pero que mutó para mostrarlo sin cortapisas.

Poco a poco, las marcas de emprendedores criollos comenzaron a buscarlo y se convirtió en uno de los influencers más importantes de la diáspora.  Así, visitando un patio de comida para promocionar un local de comida, conoció a Paulo Galleguillos, productor chileno que no dudó en llamarlo cuando llegó a La Red para crear Chilezuela, primer programo realizado por migrantes para migrantes en la televisión abierta.

Allí, como él mismo dice, cumplió un ciclo, pero poco después continuó en Aquí entre dos, programa de Telecanal, donde siguió sumando experiencia. Hoy escribe una nueva página en TV+. “Sueño con consolidarme en la televisión chilena”, comenta.

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