El gobierno mexicano responsabiliza a EE. UU. por apagones y crisis energética en la frontera

Si el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, estaba buscando municiones en su afán por reducir la dependencia de México de la energía extranjera, sería difícil superar los cortes de electricidad que afectan al norte del país.

México informó que 4.77 millones de hogares y empresas quedaron sin energía eléctrica el lunes después de que se redujeran las importaciones de gas natural desde Estados Unidos.

Los cortes son consecuencia de la peor crisis eléctrica en la historia reciente de EE.UU., donde el frío extremo ha reducido la producción de petróleo y gas. México ha restablecido el suministro eléctrico a 65% de los usuarios, informó la empresa estatal CFE en su última actualización. Pero la compañía no perdió la oportunidad de hacer un comentario político.

La interrupción es la razón por la que México debe buscar la autonomía, dijo Miguel Reyes, directivo de CFE, en un comunicado.

AMLO, como se conoce al presidente mexicano, quiere fortalecer el control de la CFE sobre el sistema eléctrico de México y está tratando de aprobar un proyecto de ley en el Congreso que otorgaría prioridad a las empresas de servicios públicos sobre las empresas privadas en el suministro de electricidad.

En su conferencia de prensa matutina del lunes, el mandatario dijo que el proyecto de ley no contravenía el T-MEC entre México, EE.UU. y Canadá, una respuesta a las recientes críticas de la comunidad empresarial en ambos lados de la frontera. El regulador antimonopolio de México ha dicho que el proyecto de ley perjudicará a la competencia.

AMLO inicialmente informó que 400,000 usuarios en México se vieron afectados por los apagones. Un representante de la CFE dijo que la información del presidente podría haber sido preliminar o incompleta.

Un importador que solicita la entrega en tan corto plazo no es algo normal en la industria del GNL e ilustra la magnitud de la escasez que enfrenta México.