Argentina rechaza eventual intervención en Venezuela
El gobierno argentino rechaza una eventual intervención en Venezuela, afirmó este sábado la canciller, Susana Malcorra, que asitió en Estados Unidos a una sesión especial de la Organización de Estados Americanos (OEA).
"Nosotros no tenemos una intención intervencionista sino una intención de contribuir a elevar el espacio del diálogo. Uno no puede reemplazar la voluntad de los venezolanos de encontrar sus propias soluciones", dijo desde Washington, según un comunicado que divulgó la cancillería.
Argentina se encuentra "a la expectativa de acompañar desde nuestra propia memoria de lo que nos pasó en 2001, que es muy reciente y que está en el ADN de nuestra sociedad", indicó Malcorra, en referencia a la peor crisis política y económica que su frió el país cuando declaró un default por 100 mil millones de dólares.
"Estamos muy a la expectativa de tender la mano y acompañar, en la medida que el pueblo y el Gobierno venezolano acepte".
El viernes, el presidente de centroderecha Mauricio Macri, quien en su campaña electoral había prometido invocar la Carta Democrática contra Venezuela, también pidió a ese país "abrise al diálogo".
"Yo le pido al Gobierno de Venezuela que abra la puerta del diálogo para que se dé un proceso de transición porque así Venezuela no puede continuar", había dicho Macri ante la prensa extranjera en Buenos Aires.
Malcorra destacó la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA celebrada el miércoles a pedido de Venezuela en la que expuso la canciller venezolana, Delcy Rodríguez.
"Fue importante que el Poder Ejecutivo venezolano viniera a la OEA y diera su perspectiva en un ámbito oficial como es el del Consejo, que da oportunidad para que todas las partes escuchen y den una posición de lugar".
En esa convocatoria, la canciller explicó que "lo que hizo la Argentina, y hubo otros Estados que también acompañaron, fue proponerle al Gobierno venezolano sentarnos para ver si hay alguna manera de encontrar una arquitectura que nos permita trabajar con la OEA, con la Unasur, con la CELAC, con el mecanismo que sea, para ayudar a destrabar muchas de las cosas que la propia canciller describió como una situación compleja".
