Poseidón se apoderó del Teatro Baralt
El escenario está a oscuras. Los espectadores solo pueden percibir con sus oídos el batir de un océano, las olas. El sonido parece real, incluso aun si el Teatro Baralt se encuentra a medio kilómetro del cuerpo de agua más cercano, el lago de Maracaibo. De pronto, los primeros personajes de la obra comienzan a aparecer sobre las tablas del teatro: se pasean por el escenario portando antorchas cuya luz devela un barco de 16 metros de largo al fondo del lugar. Es alrededor de este navío donde se desarrolla Poseidón, la última producción artística de la agrupación teatral aragüeña Compañía Makandal.
Danza, poesía, teatro, ópera, música y mitología componen la puesta en escena de la obra. Con bailes y rimas narran la historia de Artes, un semidios hijo de Poseidón encargado de mantener la alegría y paz en el pueblo griego de Abdera. En castigo a la población del pueblo por su vanidad, tres erinias (personificaciones griegas de la venganza), secuestran al semidios, desatando así la furia de su padre, Poseidón, sobre la región. Los habitantes de Abdera se armarán de valor para reestablecer el orden de su pueblo.
El personaje de Artes es interpretado por el bailarín con Síndrome de Down José Miguel Pérez. De 23 años de edad, Pérez acaba de culminar los siete años de estudio para graduarse como profesional de las artes de la Escuela Makandal, academia donde surge la compañía encargada de esta obra. “Desde los dos años comencé a bailar. Es lo que siempre quise hacer”, expresa el artista.
Makandal es una escuela de artes aragüeña que integra niños y jóvenes con discapacidades (Síndrome de Down, parálisiscerebral o de ciencias visuales y auditivas) y sin ellas. Por siete años los estudiantes aprenden teatro, canto y danza contemporánea.
“Para nosotros la discapacidad es el camino hacia la perfección. Integrar a estos jóvenes en las artes es una vía para cambiar los conceptos de la sociedad. Makandal trata de realzar las virtudes y las condiciones de cada ser. Sin diferencia”, explica Erly Ramírez, director general y fundador de la escuela, la cual ahora cuenta con dos sedes en Aragua.
Producción
La Compañía Makandal viajó desde Maracay con un equipo de 40 personas compuesto de técnicos, diseñadores, cantantes, músicos, coreógrafos, actores y escenógrafos. Transportar semejante equipo no fue tarea fácil e incluso la primera función de la obra, realizada el pasado viernes 5 de agosto, se atrasó por casi dos horas debido a problemas técnicos con el traslado. Sin embargo, esto no detuvo al elenco en presentar un espectáculo con la calidad que los ha caracterizado desde el estreno oficial de su obra en 2012. “Si la orquesta sinfónica viaja con 300, yo puedo viajar con 40”, afirmó con ironía Erly Ramírez. En cuatro años, la obra se ha presentado ya en 101 ocasiones. Después de Maracaibo, viajarán a Cumaná, Barquisimeto y de nuevo Maracay.
“Gracias a Maracaibo por recibir esta gira de cinco estados que surge con la única intención de abrir en cada una de las ciudades una academia Makandal”, expresó Ramírez al final de la primera función de la obra.
