El diario plural del Zulia

Pareja abandona a su hija adoptiva tras descubrir que es una mujer con enanismo que "quería matarles"

Los papeles de adopción de Natalia Grace decían que tenía siete años, pero en realidad tenía 22. Ahora, los padres, imputados por abandono, han contado cómo la 'niña' les amenazaba y les hacía vivir como en una película de terror

La historia de Kristine y Michael Barnett recuerda a la trama de la película 'La huérfana'. En 2010, el matrimonio de Indiana, Estados Unidos, decidió adoptar a Natalia Grace, una niña ucraniana de siete años.

Sin embargo, lo que no sabían entonces era que, en realidad, se trataba de una mujer de 22 años con enanismo que se hacía pasar por una menor. Ahora, la madre, que está imputada junto a su marido por abandonar a la 'niña', ha declarado que esta quería matarles, según ha informado 'Daily Mail'.

Cuando la pareja adoptó a Natalia Grace, sus papeles decían que tenía siete años, pero esto no era verdad, se trataba de un fraude. Sus padres empezaron darse cuenta de que algo raro pasaba cuando notaron que utilizaba un vocabulario que no se correspondía con su edad y tenía la menstruación.

Estas sospechas fueron confirmadas por un médico que, ya en 2011, aseguró que tenía más de 18 años. El especialista dejó por escrito en una carta que la edad de su hija era "claramente inexacta", un hecho que comprobó a través de los registros dentales y el desarrollo sexual de Natalia.

Ahora, este texto forma parte de la defensa de los padres, que están imputados por la justicia de Estados Unidos por abandonar a la 'niña' en 2016. Pero la pareja ha declarado que ellos son las verdaderas víctimas, ya que Natalia "quería matarles".

Pasó exactamente lo mismo que en la película 'La huérfana'", ha afirmado Kristine Barnett en una entrevista para 'Daily Mail'. "Hacía declaraciones y dibujos diciendo que quería matar a miembros de la familia, enrollarlos en una manta y enterrarnos en un patio", ha afirmado.

La madre adoptiva ha relatado como, presuntamente, Natalia se ponía de pie junto a la gente en mitad de la noche y les impedía dormir. "Saltaba de coches en movimiento. Esparcía sangre por espejos", ha añadido.

La pareja, que recibía amenazas constantes, tuvo que esconder los objetos afilados. "Le vi poner químicos, lejía en mi café y le pregunté: '¿Qué haces?'. Ella me dijo: 'Estoy intentando envenenarte'", recuerda Barnett en la entrevista al medio británico.

Los medios me acusan de ser una maltratadora de niños, pero no hay ninguna niña aquí", ha apuntado la mujer. Barnett se encuentra en libertad tras entregarse y pagar una fianza de 5.500 dólares.

Lea también
Comentarios
Cargando...