Olmo Rosario: El inesperado cuarto bate de las Águilas

Olmo Rosario no tiene el perfil de un cuarto bate tradicional, pero la necesidad de un toletero que ocupara ese lugar en el orden de las Águilas del Zulia, llevó al manager Marco Davalillo a usarlo en esas funciones, a pesar de que dominicano no cuenta con el biotipo de un slugger.

“Estoy haciendo el trabajo porque no tenemos cuarto bate. Es una responsabilidad muy grande, pero yo me lo tomo como si fuera un primer o segundo bate”, dijo el quisqueyano, quien reveló que siempre ha fungido como segundo, tercero o quinto en el orden ofensivo en los equipos que ha defendido en su larga trayectoria.

Rosario se bajó del avión e hizo su debut en la zafra inmediatamente (ante Magallanes el pasado 7 de noviembre). Al llegar al estadio y revisar la alineación, notó que era cuarto en el orden ofensivo, por lo que, sin pensarlo, le advirtió al piloto que ese no era su lugar en el lineup. Ese día, el nacido en Haina se fue de 4-2, con carrera empujada y, sólo en dos ocasiones, ha sido movido de ese puesto.

“Yo le dije al manager (Marco Davalillo) que yo no era cuarto bate. Sentí un poco de presión al principio, pero él me dijo que eso era mental, que estuviera tranquilo y gracias a Dios se están dando las cosas”, reconoció Rosario, que está en su tercera temporada en la LVBP.

Su única experiencia como cleanup se remontaba a su primera pasantía en el circuito con Tiburones de La Guaira en la 2016-2017, cuando el manager Oswaldo Guillén experimentó con el quisqueyano en dos juegos y éste terminó fallando en seis turnos.

Hasta ahora, el utility de 39 años de edad no ha defraudado a Davalillo, tras promediar .500 (54-27) de average como cuarto bate en 14 de los 16 juegos que ha disputado.

“Olmo (Rosario) tiene la capacidad de estar en cualquier parte del lineup”, opinó el dirigente Davalillo. “Él nos da estabilidad en esa posición, aunque no se vea como un cuarto bate de esos tradicionales, que tienen fuerza y sacan jonrones, él es más de contacto, pone la bola en juego, es oportuno y tiene paciencia en el home”, continuó el piloto.

“Me siento muy bien. Es una bendición de Dios lo que está pasando con mi trabajo”, expresó el dominicano, que además suma 15 empujadas, seis dobles, un triple y dos vuelacercas en la contienda, siendo líder bate de su equipo con .450 y primero en hits conectados (27). En tanto que fue electo Jugador de la Semana, tras su brillante desempeño con el madero, entre el 18 y 24 de noviembre.

Su producción con el madero ha sido notoria desde que llegó al nido rapaz. A tal punto que hilvanó una cadena de 11 encuentros con al menos un imparable y apenas se ha ido en blanco en tres de sus 16 encuentros. Por si fuera poco, el caribeño acumula nueve juegos multi hits y, en al menos cuatro desafíos, ha empujado más de una rayita.

“La química y la confianza que nos da el manager ha sido importante. Cuando te sientes entre familia, las cosas salen bien sin tu buscarlas, creo que ese ha sido el éxito de lo que está pasando”, razonó el versátil pelotero, que se considera un trotamundos del beisbol, por haber transitado en diversas ligas como en Italia, Nicaragua, Canadá y México.

En sus tres zafras en la pelota criolla, Rosario presenta una línea ofensiva vitalicia de .329/.388/.452, con ocho vuelacercas y 50 cuadrangulares, en 88 cotejos repartidos entre Tiburones, Bravos de Margarita y ahora, Águilas del Zulia.

“El conocimiento de la liga ha sido muy importante para él, aparte llegó listo de México para jugar el primer día. La experiencia que tiene nos ha ayudado a ganar muchos partidos”, insistió Davalillo.