El diario plural del Zulia

Mourinho se declara no culpable del rendimiento del United

Mourinho reprochó a sus jugadores una apatía general, rechazando una vez más asumir responsabilidades personalmente

No es habitual, pero el rayo ha caído dos veces en el mismo lugar en poco más de 24 horas: José Mourinho se quitó responsabilidades sobre el juego decepcionante del Manchester United en dos ocasiones, con apenas unas horas de separación.

En Old Trafford todavía duele mucho la eliminación de la pasada semana ante el Sevilla en los octavos de final de la Liga de Campeones, que era la gran ilusión del equipo.

La imagen ante los andaluces fue pésima y tampoco fue excesivamente brillante en la victoria del sábado por 2-0 ante el Brighton en los cuartos de final de la Copa de Inglaterra, un torneo menor con el que los 'Red Devils' intentarán al menos acabar el curso con un título.

Después de ese triunfo, Mourinho reprochó a sus jugadores una apatía general, rechazando una vez más asumir responsabilidades personalmente.

Varios nombres importantes del pasado reciente del club (Paul Scholes, Rio Ferdinand, Gary Neville) han reprochado a 'Mou' su planteamiento demasiado conservador en los partidos, en contraste con los enfoques valientes de Manchester City y Liverpool, los dos clubes ingleses que sí lograron pasar a los cuartos de la Champions.

El portugués de 55 años pareció hacer oídos sordos y se negó a entonar ningún 'mea culpa'.

En vez de eso, Mourinho criticó la falta de carácter de algunos de sus jugadores. Únicamente 'salvó' a jugadores contados (Nemanja Matic, Romelu Lukaku, el joven Scott McTominay).

Falta de motivación

"No me gustó el partido", admitió Mourinho tras la victoria sobre el Brighton. "Quería más personalidad en el equipo porque sentí a menudo que Matic era una isla de personalidad, de motivación y de control, rodeado de falta de personalidad, de falta de clase y de falta de motivación".

"Para mí, un jugador del MAnchester United es un jugador que, pese a que juegue mal, lo sigue dando todo por el equipo (...) Y eso es algo que algunos no hacen", añadió.

"A algunos chicos les he visto con miedo a jugar. Cuando el sol brilla, cuando todo va bien (...) todos los jugadores son buenos y quieren el balón", reprochó el técnico luso, en alusión a la nevada que cubrió de blanco el césped en el partido ante el Brighton.

Estrellas como Paul Pogba y Alexis Sánchez quedaron en el banquillo de suplentes en ese partido.

Las polémicas palabras del entrenador del United llegaban menos de un día después de otro discurso de doce minutos que fue también muy comentado.

El viernes, en el centro de entrenamiento de Carrington, Mourinho había realizado una defensa de su labor mediante la táctica de echar balones fuera.

En esa ocasión los dardos del portugués no iban contra los jugadores, sino contra el club y su "herencia".

"Los aficionados tienen derecho a sus opiniones y a reaccionar, pero hay algo que yo llamo patrimonio del fútbol y es lo que hereda un entrenador", dijo entonces, subrayando que en las siete temporadas desde la salida del legendario entrenador Alex Ferguson el mejor resultado del United en la Champions había sido un cuarto de final y que la mejor temporada en la Premier League había terminado con un cuarto puesto.

Lea también
Comentarios
Cargando...