La obligación de ganar madridista ante una Real Sociedad de estreno
El Real Madrid recibe en el Santiago Bernabéu a una Real Sociedad que estrena técnico, Imanol Alguacil, sintiendo la obligación de ganar para no perder el tren de la Liga, después de comenzar el 2019 con un empate en el partido aplazado ante el Villarreal y quedar a siete puntos del Barcelona.
La imagen imponente con la que el equipo de Santiago Solari conquistó el Mundial de Clubes, donde no encontró rival, se diluyó en el estadio de la Cerámica. El inicio de año dejó el reencuentro con los mismos males, especialmente en una segunda parte de indolencia y falta de motivación.
Si no quiere despedirse de la Liga de nuevo en fechas navideñas, el Real Madrid tiene la obligación de reaccionar de inmediato y encadenar buenos resultados en una competición a la que no toma el pulso por sus continuos tropiezos (tres empates y cinco derrotas tras 17 jornadas).
Pierde además Solari a uno de sus referentes, el galés Gareth Bale, por su enésima lesión de sóleo. Su ausencia provoca una recomposición táctica si la apuesta del técnico es Isco Alarcón. Mantendría el 1-4-3-3 si el elegido para comenzar el encuentro es el brasileño Vinicius, con Lucas Vázquez en la derecha y un inspirado Karim Benzema como 9 para completar el tridente.
Todo apunta a que es el momento que esperaba Isco para recuperar galones. Llega provocado por las lesiones, ya que a la ausencia de Bale se suma también la de Marco Asensio y Mariano en ataque, con Marcos Llorente completando el parte de bajas. El centrocampista malagueño encara un momento clave par dar un giro a su situación, suplente y con pocas oportunidades para brillar con Solari.
La llegada de la Copa del Rey, competición en la que habrá un mayor número de rotaciones y minutos para los que menos continuidad tienen, invitan a pensar en pocas modificaciones de Solari en su once. Quizás Nacho pueda tener minutos ya recuperado, Odriozola entrar en la derecha ante su ex equipo o Ceballos dar descanso a un Modric que acaba de superar un proceso febril.
Aunque en principio serán los mismos jugadores que comenzaron el año con un nuevo tropiezo en un encuentro que tenían encarrilado y pudieron sentenciar antes de ser empatados, los que tendrán que reaccionar. La Real Sociedad es un equipo propicio según las estadísticas de las últimas temporadas. Siete victorias consecutivas madridistas en los últimos precedentes y hasta nueve triunfos enlaza el conjunto madridista en el Bernabéu ante el equipo donostiarra.
La Real Sociedad vuelve a poner su contador a cero con la llegada de Imanol Alguacil, el técnico que sustituye a Asier Garitano y que se presentará en el Santiago Bernabéu con necesidad de puntuar, en un estadio en el que los donostiarras han salido goleados en las últimas cuatro temporadas.
Los problemas para Alguacil vuelven a ser muy similares a los que padeció su antecesor: acumulación de lesiones que le impiden oponer probablemente al equipo que tenía en mente, comenzando en la portería con el retorno del argentino Gero Rulli, cuestionado y con malas actuaciones en el feudo del Real Madrid.
Tampoco estará Theo Hernández porque es futbolista en propiedad del conjunto blanco cedido a la Real. Kevin, su sustituto, lo tiene más que complicado y en el medio campo y adelante los problemas los generan el bajo estado de forma de hombres con clase como Illarramendi, Willian José, Januzaj y Juanmi Jiménez. Además, Sandro Ramírez se perderá este partido por lesión.
La anterior etapa como entrenador interino, entre abril y mayo de 2018, fue muy fructífera para Alguacil, que se ganó a la afición y al vestuario con buenos resultados gestados en Anoeta, aunque fuera de casa las cosas se tornaron diferentes con tres derrotas en cinco salidas. Este año, sin embargo, los vascos son el mejor segundo visitante de la liga. El cansancio madridista por el partido ante el Villarreal del jueves siente la Real, más fresca y con la ilusión que siempre generan los cambios en el banquillo, que aumentan sus opciones de puntuar.
