El diario plural del Zulia

“JUANPI” AÑOR GESTA SU ÉXITO EN CASA

A Juan Pablo Añor no le quedó más opción que ser paciente y saber llevar los tiempos. El mediocampista de 22 años se fue muy joven de su natal Caracas hacia España, fichado por Atlético Malagueño, desde entonces pasó por todas las inferiores del Málaga. Poco a poco se fue haciendo un nombre.

Con una formación más europea que venezolana en lo futbolístico fue uno de los nombres destacados en las Vinotinto sub-17 y sub-20. En su club ya comenzaba a ganar protagonismo y recibió llamados del primer equipo y en la temporada 2014-15; realizó su debutó ante el Valencia el 29 de agosto y en esa misma campaña disputó dos partidos ante Barcelona y Real Madrid, pero incomprensiblemente las oportunidades ante clubes más pequeños no llegaban.

Pero desde la mitad de la actual zafra, en la que se consolidó en el conjunto dirigido por Javi Gracia, ha disputado 29 encuentros, 18 de titular de los cuales 15 fueron desde el 10 de enero ante el Celta de Vigo, primer juego de los andaluces sin el marroquí Nordin Amrabat, quien fue vendido al Watford inglés. Añor tomó su testigo en la creación.

Y su apellido empezó a retumbar con más fuerza. Anotó cuatro goles y dio una asistencia en esta edición de La Liga y su buen andar le valió varias convocatorias con la selección nacional absoluta y aún permanece entre los preconvocados para la Copa América Centenario.

Pero la historia vinotinto con el apellido Añor no es reciente. Su papá, Bernardo, representó a Venezuela en los premundiales para México 86 e Italia 90 y se convirtieron en la sexta pareja padre–hijo que de ende los colores patrios.

Bernardo Añor, progenitor de “Juanpi”, conversó con Versión Final sobre al ascenso de su cuarto y último hijo, uno de los orgullos de la familia Añor Acosta. “A mí como padre me deja muy tranquilo porque en esta posición se enorgullece de lo que hagan. Pero su madre es la artífice de todo esto, fue su fortaleza”, añadió.

El presente de “Juanpi” pudo haber sido diferente. Sus dos hermanos mayores fueron muy guiados por su padre a estudiar en el exterior a pesar de que querían ser futbolistas profesionales, cosa que su hermano, Bernardo, sí logró con un recorrido importante en el fútbol de Estados Unidos.

“Yo prácticamente obligué a que se fueran a estudiar a Estados Unidos a los dos mayores. Con ‘Juanpi’ me pregunté ¿por qué? Si yo viví de esto, fue mi pasión y lo disfruté. Pero vi que el fútbol acá en el país estaba difícil para tener un futuro del deporte. Son cosas que uno sufre y su mamá fue fundamental para que lo logrará, pero ahora lo disfrutamos”.

El mediocampista zurdo tuvo poca formación en el país. Dio sus primeros pasos en el Colegio San Ignacio de Loyola y una corta pasantía de un año en la filial del Caracas FC antes de su paso definitivo a Málaga, un club en el que han triunfado sus compatriotas Salomón Rondón y Roberto Rosales y con los juveniles Mikel Villanueva y Jaime Moreno tocando la puerta.

“Tuvo sus momentos de debilidad pero en la familia tenemos una gran llave entre todos, de muchísima comunicación. En casa todos los sentimientos salen a relucir y, aunque no fue fácil, todo pasa por el trabajo. Eso le dio la constancia para mantenerse ahí y que eso pudiera facilitar que le dieran la oportunidad esta temporada”, resaltó el exfutbolista.

Como alguien que pasó por tantas cosas dentro de los terrenos de juego, sabe que lo que viene para su hijo es lo más complicado. “Acá viene lo fastidioso de ser papá. Todo bien pero hay que seguir luchando y trabajando, es algo repetitivo porque este mundo y más a nivel internacional es muy fuerte”.

Pero el orgullo está ahí. “La fibra se mueve cada vez que lo veo con Málaga y aún más con los de la Vinotinto. Pero estoy viendo los partidos en las repeticiones, me volví abuelo antes de tiempo, sufro demasiado. Antes los disfrutaba más y los aconsejaba pero ahora hasta se me nublan los ojos y el fútbol ha cambiado mucho desde lo que fue en mis tiempos y aún no me acostumbro, algunos consejos no me los entienden pero entre los dos sumamos”, con esa entre risas.

Lea también
Comentarios
Cargando...