Gleyber Torres conversó con Versión Final sobre su cambio a los Yankees

Una de las grandes promesas de Venezuela en el béisbol de las Grandes Ligas es Gleyber Torres. Ayer, los Cachorros de Chicago utilizaron al campocorto como pieza central de un cambio para hacerse con los servicios del estelar cerrador Aroldis Chapman y darle fin a los rumores que desde la noche del domingo surgían en torno a ambos peloteros.

El criollo, catalogado como el mejor prospecto de los oseznos, no ocultó su emoción por llegar a una de las franquicias más importante del béisbol y de inmediato comenzó a enumerar para Versión Final, vía telefónica, los retos que se plantea con el uniforme de los “Bombarderos” del Bronx, con quienes planea debutar y establecerse.

"Estoy bastante emocionado por ser parte de tremendo cambio entre los Cachorros y los Yankees y por representar ahora a este equipo, aunque también un poco triste por las amistades y los años que dejo con los Cachorros, pero entiendo que esto es un negocio. Hay que ser fuerte”, aseguró Torres.

“Mi idea es establecerme en este equipo. Me cambiaron bastante joven, así que posiblemente tengan planes conmigo en el futuro”, analizó. “Espero que el equipo me empiece a dar las oportunidades que me vaya ganando para poder establecerme con ellos en las grandes ligas para ganar más campeonatos de los que tienen”.

Grata bienvenida

El venezolano fue asignado de inmediato a la sucursal Clase A avanzada de los Yankees, donde será dirigido por el mánager Pat Osborn. No obstante, una de las primeras llamadas que recibió al confirmarse el cambio fue de Luis Dorante, dirigente de Clase A media de la organización.

“Dorante fue la primera persona que llamó y me dijo que estaba muy contento de mi llegada al equipo, que tenía una mano amiga en su persona y que lo recurriera a él por cualquier cosa que necesitara. De verdad me pareció tremenda persona. Me dijo que no podía esperar para verme jugar”, comentó.

Junto a Torres, considerado el vigésimo cuarto (24) mejor prospecto de todo el béisbol, los Yankees recibieron también a Billy McKinney, al pitcher derecho Adam Warren y al jardinero Rashad Crawford, aunque fue el criollo la pieza central que hizo a Nueva York acceder al cambio de Chapman, uno de los mejores cerradores del momento.

“Me siento halagado, aunque sinceramente es un nuevo reto que tengo. Debo seguir haciendo mi trabajo sin querer impresionar, simplemente seguir mi juego”, comentó el criollo, quien con los Cachorros en 94 juegos en clase A dio muestras de su talento, bateando .275, con nueve jonrones y 47 impulsadas, con porcentaje de embasado de .359 y 19 bases robadas.

Jeter como reflejo

Gleyber, de apenas 19 años y que hoy viajará a Orlando a unirse a su nueva sucursal, dio muestras de su madurez al asegurar que no se amilana por llegar a los Yankees, una de los equipos más exigentes del deporte. “Sinceramente no siento presión. Creo que es una fanaticada bastante ruda, pero también es una de las mejores del béisbol”. Al mismo tiempo, se mostró emocionado con la posibilidad de heredar en algún momento, la posición donde jugó Derek Jeter, uno de sus ídolos de infancia.

“Jeter es uno de los mejores shortstop que ha pasado por el béisbol ¿Qué fanático no recuerda Derek Jeter?”, espetó. “No te puedo decir que voy a ser el próximo Derek Jeter porque eso es imposible, pero voy a tratar de seguirle los pasos y hacer cosas buenas para que también me puedan recordar a mí”, aseguró.

Ahora con los Yankees, Torres también pasará a ser el prospecto número uno de esa organización, con la que busca dar el salto a las mayores. “Mi sueño es llegar a grandes ligas lo más pronto posible, darles todo lo que yo tengo, ganar todas las series mundiales que pueda. Sé que tengo grandes cosas en mi ofensiva y defensiva para aportarles”, finalizó el caraqueño.