Frialdad institucional con Messi
Leo Messi se queda. Era la noticia más esperada por el barcelonismo. La que ha marcado las últimas dos semanas la actualidad azulgrana y toda la agenda futbolística de gran parte del planeta. Pero la Directiva ha respondido con silencio. Ninguna voz autorizada de la cúpula culé se ha pronunciado sobre las palabras del argentino.
La única reacción del Barça, como institución, fue publicar la entrevista a Messi titulando por su amor por la institución. En ningún momento los directivos del club han valorado la polémica de las últimas semanas. La última vez que Bartomeu habló en público fue en la rueda de prensa de despedida de Rakitic.
Las declaraciones de Leo son durísimas. Torpedean la línea de flotación de una Directiva que intenta controlar una de las situaciones más delicadas de la historia reciente del club. Gestionar esta guerra fría con el que es el ídolo de la afición supone un trabajo de precisión.
Por otra parte, los que sí han valorado las palabras de Leo Messi son los líderes de la oposición. Todos se han mostrado muy contentos por la decisión final del atacante. El barcelonismo en general ha respirado más tranquilo tras las declaraciones del argentino.
La oposición, que está recogiendo firmas para llevar a cabo una moción de censura, sabe que Leo Messi ha dejado muy tocado al presidente Bartomeu. El 10 azulgrana se convertirá, seguro, en uno de los principales argumentos de los precandidatos para movilizar a la grada.
