En Santa Rita mueren los caballos rezagados
La ley de la selva reina en el Hipódromo de Santa Rita. Uno a uno caen los menos aventajados, aunque la suma de 56 caballos muertos desde su cierre, el pasado 15 de marzo, puede ir en franco ascenso entre los 250 que aún permanecen en el lugar.
A los propietarios les ha tocado privilegiar a sus ejemplares mejores dotados genéticamente por encima del resto. “A los caballos que no son de alta calidad los están dejando morir de hambre prácticamente”, cuenta Robert Arrieta, presidente del Colegio de Veterinarios de Maracaibo.
La decisión es de los dueños, obligados por las limitaciones que desde el cierre varias fuentes han confirmado a este rotativo: las amenazas de las bandas criminales que dificultan el acceso al recinto y del Grupo Anti Extorsión y Secuestro (Gaes). “Tenemos varios veterinarios allá, algunos trabajan directamente con el hipódromo y otros privados para los dueños de los caballos. Son pocos porque desde el cierre el acceso es prácticamente imposible”, afirmó Arrieta.
“Esto da mucha impotencia. Lamentándolo mucho allí también pasa como en todos los otros rubros de animales, no se consiguen los alimentos concentrados y para calmar el hambre le están dando alimentos de bovinos y aves pero el equino es muy delicado con su sistema digestivo. Muchos mueren de cólicos pero pasa que el poquito de alimento que se consigue, a veces hasta con 400 por ciento de sobreprecio, va destinado primero a los purasangres”, explica el especialista.
“Lastimosamente se favorece a los que tienen el mejor material genético, que resultan los ejemplares más costosos”, añadió Arrieta. Como vocero del Colegio de Veterinarios, Robert Arrieta alzó su voz para que tanto como el gobierno regional y nacional tomen acciones. “No dejan ni sacar a los animales, muchos de sus dueños no son de gente de este estado y uno lo que debería esperar es un poco más de fl exibilidad para evitar más muertes”.
Advierte que podría llegar el día en el que los alimentos no puedan llegar ni siquiera a los purasangres por lo que el gran cementerio equino en el que se convirtió Santa Rita seguirá en franco crecimiento de no llegar.
Respuesta oficial
Las reacciones a lo publicado por Versión Final no se hicieron esperar. Fernando Valentino también conversó con el medio y dio respuesta desde la presidencia del Instituto Nacional de Hipódromos (INH). “Yo no puedo dar versión oficial porque el hipódromo está a cargo del Gaes, que está manejando el tema operacional del hipódromo”, indicó vía telefónica.
“Los propietarios son unos sinvergüenzas que abandonaron a los animales”, manifestó el funcionario.
Desestimó las declaraciones que informan de extorsiones que no permiten a los dueños de los equinos retirarlos del óvalo zuliano. “Hay propietarios que sí han podido sacarlos de ahí sin mucho inconveniente y saben que cuentan con la custodia de la GNB”.
Valentino afirma que hay atención de lo que ocurre en el municipio oriental gracias a la comunicación con el Gaes. “Estamos en contacto permanente pero actualmente hay un proceso judicial abierto y esperamos por las conclusiones del mismo. No manejo mucha información de qué pasa con la investigación”, sentenció. Desde el INH hay disposición en revertir daños. “Les garantizamos alimentos a los caballos en la medida de nuestras posibilidades”.
Habla el general
Por su parte, el general Alejandro Pérez Gámez, jefe de la Guardia Nacional Bolivariana en el Zulia y uno de los encargados del hipódromo, explicó que: “Antes de tomar Santa Rita nos reunimos con un representante del INH, por instrucción del Ministerio de Deporte, para conversar con todos los propietarios. Les dijimos qué debían traer para retirar a sus caballos”.
“A todos se les abrió la puerta para sacar a sus animales, lo que ahí pasa es por el abandono de ellos mismos”, recalcó el funcionario castrense. Desestimo, al igual que Valentino, extorsiones para el traslado de los equinos.
“No puedo afirmar eso. Que traigan los papeles, sus documentos y justifiquen la propiedad de los mismos para llevárselos. Si tienen problemas con sacarlos, vayan a alimentarlos y ya está. Quien presente su documentación puede llevarse a los animales. Desmiento cualquier traba de nuestra parte”, dijo el jefe de la Zona 11.
Fue el 15 de marzo cuando el Gaes ocupó el óvalo y desde entonces resguarda el óvalo. Para Pérez Gámez todo fluye con total normalidad: “Las operaciones allá están suspendidas y por ende ningún contratiempo, la seguridad está resguardad. Al inicio de esto nosotros mismos coordinamos alimento para los animales y luego se abrió la posibilidad de sacarlos y hubo dueños que lo hicieron”, infirió.
