CARLOS CARRASCO: EL AS BAJO LA MANGA
La lesión del as de la rotación de los Indios de Cleveland, Corey Kluber, lucía como un obstáculo que complicaría las aspiraciones del equipo para ganar el banderín de la división central de la Liga Americana, pero el venezolano Carlos Carrasco está emergiendo como un autentico número uno del staff de iniciadores de los aborígenes.
El larense es uno de los tres mejores serpentineros de las Mayores en la temporada 2017. En siete presentaciones, tiene efectividad de 1.86, quinta mejor de la Liga Americana, en 48.1 episodios, con 46 ponches, ocho boletos y registro de cuatro victorias y dos derrotas. Su promedio de bases por bolas y hits por innings lanzados es el mejor de la Gran Carpa (0.766) y también es líder en WAR (victorias sobre el reemplazo) entre los lanzadores (2.4).
“Es una gran ventaja tenerlo”, dijo el jardinero central, Lonnie Chisenhall, sobre Carrasco al portal web Cleveland.com. “Sé que es un número dos (titular), pero lanza la pelota como un número uno. Sus estadísticas están mostrando eso en este momento”.
El derecho tiró el martes 7.0 episodios en blanco, con tres incogibles, siete abanicados y sin boletos ante los Azulejos de Toronto, para acreditarse su cuarta victoria del 2017. Con esa apertura, el criollo llegó a seis salidas al hilo en la que trabaja al menos 6.0 entradas y permite tres o menos rayitas. Esa seguidilla igualó la mejor racha en su carrera de presentaciones cumpliendo esos parámetros, en el 2010 también sumó seis.
“Lanzó todo el encuentro en una situación donde si cometía un error, se acercaban en el marcador”, explicó el mánager Terry Francona. “Estuvo realmente bien. Ha estado realmente bien todo el año. Necesita continuar así”.
“La clave fue lanzar strikes”, aseguró Carrasco al finalizar su salida ante los canadienses. “Seguí el plan con Yan Gomes (receptor), me siento muy bien”.
Mezcla efectiva
Parte del éxito que está teniendo el larense en el inicio de la campaña, es su sapiencia para mezclar los pitcheos con los que cuenta y su efectividad. La recta, principal envío, lo ha utilizado en 312 oportunidades, pero el resto de sus lanzamientos los utiliza de manera proporcional: 104 veces la slider, 88 el cambio de velocidad y 78 la curva.
Su slider, segundo mejor pitcheo, tiene un porcentaje de swings fallidos de 29.03 %, la curva (15.63 %) y el cambio (13.79 %) le siguen. Ante ese primer envío, los rivales promedian apenas para .040 en 25 turnos, con nueve ponches, mientras que a la curva le ligan para .059 en 17 chances ofensivos, con igual número de abanicados.
La mezcla de pitcheos le permite tener el factor sorpresa, que está ocasionando que el 25.2 % de los batazos que le conectan salgan con fuerza. Ese porcentaje es el segundo más bajo de su carreras, solo superado por el 24.9% que tuvo en el 2014.
Carrasco había asegurado, antes de iniciar la temporada, que esta sería su gran año en las Grandes Ligas. Esa afirmación, hasta el momento, la está cumpliendo con creces y proyecta finalizar la campaña con 20 victorias en 35 salidas, con 245.0 innings lanzados, 234 ponches y efectividad de 1.83, lo que lo llevaría a ser un fuerte candidato por el premio Cy Young, aunque la temporada aún es joven y aún queda mucho trecho por recorrer.
