A ritmo demoledor
En una temporada de 162 juegos, es poco confiable las conclusiones que se pueden sacar en el primer mes de la temporada del rendimiento que puede tener un jugador o un determinado equipo a lo largo de la campaña, sin embargo, una buena cuota de peloteros venezolanos sentó las bases para encaminar su desempeño hacia varios registros importantes.
El rendimiento ofensivo de José Altuve, Víctor Martínez, Odúbel Herrera y Martín Prado en abril siembre grandes expectativas del impacto que pueden tener en sus divisas esta temporada. Este grupo de peloteros criollo se mantiene entre los líderes ofensivos en este arranque del campeonato.
El desempeño de Altuve es completamente desproporcional al registro de los Astros de Houston. El camarero criollo llegó a siete vuelacercas en un lapso de 25 encuentros esta campaña, es decir, en 36 juegos menos de lo que lo hizo en 2015, cuando consiguió un tope personal de 15 estacazos.
Sus 18 extrabases igualan la mayor cantidad para un pelotero criollo en un lapso similar de partidos. Álex Gonález lo había conseguido en 2010. Altuve, quien ahora se muestra con un bateador mucho más selectivo en plato, batea .305 con un promedio de embasado de .400 y un OPS superlativo de 1.011, además ser el líder en bases robadas (9) y dobles (11) de la Liga Americana.
Máquinas de bateo
Tras su peor zafra en las Mayores, Víctor Martínez sigue demostrar, que si la salud lo acompaña, es uno de los bateadores más eficaces de la liga.
Mientras Miguel Cabrera se reencuentra con su ritmo habitual, Martínez ha sido esta campaña el catalizador de la toletería de Detroit. Con 18 remolcadas lidera a legión venezolana en lo que va de campeonato. Reflejar el tercer mejor promedio de bateo (.350) del joven circuito, además de un OPS+ o ajustado de 190, el segundo más alto en la Americana.
En la Nacional es Prado quien comanda la lista en cuanto al average. El antasalista de los Marlisn de Miami inicia mayo con un porcentaje astronómico de .410.
Prado se mostró en abril como el bateador más efectivo en todas las Grandes Ligas. Hace contacto con el 92.9 % de los envíos que le hace swing, siendo la mayoría (96.8 %) dentro de la zona de strike, según datos de FanGraphs, ambos guarismos con los más altos en su liga.
Un nuevo Odúbel
Pete Mackanin, mánager de los Filis de Filadelfia, le otorgó a Herrera la responsabilidad de ser el motor de arranque de su alineación. El zuliano lleva extraordinarias calificaciones para graduarse como un primer bate a nivel del big show.
Con sus 23 boletos y 25 imparables, Herrera registra el segundo OBP (.449) más alto de la Liga Nacional. En apenas 25 encuentros Odúbel está a solo cinco pasaportes de alcanzar la cifra que dejó en 2015, su año de debut.
Odúbel ha sido la chispa en el lineup de un equipo que sorpresivamente inicia mayo con cinco juegos por encima de .500 (porcentaje de triunfos). El zuliano se ha ganado su lugar mejorando un aspecto clave para un primer toletero: la paciencia en el home. Herrera es el bateador que más pitcheos promedia (4.7) por apariciones en el plato.
