Trabajadores eléctricos del Zulia advirtieron en el 2015 la crisis que se avecinaba
Hace tres años, el 3 de junio del 2015, fue enviado por los trabajadores de la sede regional Zulia del Ministerio del Poder Popular para la Energía Eléctrica (MPPEE) un memorándum en el que detallaban los factores que podrían ocasionar las constantes interrupciones del servicio eléctrico en la región.
La carta, que informa sobre la tendencia decadente del sistema eléctrico en el Zulia, fue recibida y firmada por la Dirección General del Despacho de la institución central. Sin embargo, se hizo caso omiso de las advertencias que hoy se cumplen como profecías y disminuyen la calidad de vida de los zulianos.
Desde el 2012, los empleados denunciaban que existía poco personal para cubrir el tiempo de horas que debían laborar ante la ejecución de importantes obras. Dos años después, acusaban de la falta de presupuesto propio para cubrir las necesidades de los trabajadores, ejecutar el mantenimiento de la infraestructura y flota vehicular.
El documento destacaba un incremento del tiempo de interrupción del servicio, que pasó de 75 minutos en el 2008 a 120 minutos.
“Esta situación es particularmente preocupante, considerando que el estado Zulia históricamente ha mantenido valores de Tiempo Total de Interrupciones (TTI) por debajo de 7 horas (anuales), el cual es un valor típico de otras empresas latinoamericanas de distribución de energía eléctrica, sin embargo, la tendencia a la desmejora podría provocar que se alcance e incluso se supere esa referencia, en caso de no tomarse acciones oportunas de parte del operador y prestador del servicio", detalló el informe.
Las fallas eléctricas en Venezuela y el Zulia son ocasionadas por la indisponibilidad forzada de los sistemas de generación termoeléctrica y en los sistemas de transmisión. “El 80% de las interrupciones del servicio se deben a factores externos (derivados de la dependencia en un 60% del Sistema Interconectado Nacional), mientras que un 20% fueron provocadas por fallas en las planta termoeléctricas propias".
Los racionamientos han sido previsibles y se registran desde el 2012, 2013 y 2014 en los mismos meses, por lo que se podrían haber tomado las medidas correctivas para disminuir su impacto negativo sobre la ciudadanía, según la carta. “Las interrupciones del servicio eléctrico comienzan durante marzo, aumentando hasta un máximo en septiembre y decayendo en los meses de menor temperatura, en octubre y noviembre”.
En el 2015, la indisponibilidad del Parque de Generación Termoeléctrica en el Zulia se ubicó entre un 81 y 76%; mientras que en el 2018 se ubica en menos del 15 %, sugirió Alejandro López, ingeniero eléctrico y extrabajador del MPPEE.
"De haberse reducido en un 50% la indisponibilidad en el Parque de Generación Termoeléctrica del Estado Zulia, la necesidad de racionamiento en esta región no hubiese existido, al menos en lo concerniente a las causas imputables a la generación local y que, aún cuando la capacidad instalada en el Zulia se ha incrementado desde 1737 MW hasta 2239 MW, entre 2010 y 2012, la disponibilidad ponderada total, ha bajado desde 81% hasta un 76%".
Los expertos advertían que la debilidad del Sistema Interconectado Nacional y el retraso en la culminación de las obras de generación, trasmisión y distribución eléctrica generarían un colapso del sistema eléctrico en la entidad. También sugerían la entrega de un presupuesto propio para la institución regional, el incremento de la formación técnica y profesional, ampliación de la flota vehicular y hacer un seguimiento de las interrupciones.
El equipo reporteril de Versión Final tuvo acceso al documento gracias a la colaboración del ingeniero Alejandro López, quien pertenecía a la dirección general de Fiscalización del Servicio Eléctrico.
Lea el documento completo aquí: Carta_Trabajadores_Zulia_2015
