Siete de cada 10 zulianos reduce raciones al mínimo para que rinda la comida

¿Qué vamos a comer mañana? Esa pregunta atormenta a diario la mente de Beatriz Pérez, una maestra y madre de dos hijos que lucha para que su familia salga a flote. Sus ingresos mensuales no le permiten acceder ni a una quinta parte de la canasta básica pese a contar con el apoyo de su esposo. Los recursos que ambos reúnen al mes no superan los 100 dólares. Alimentarse tres veces al día para ellos es una misión imposible.

Vivimos al límite, el sueldo no alcanza, lo que mi esposo y yo ganamos es insuficiente. Gracias a Dios buscamos la manera y no hemos dejado de comer, pero es muy difícil conseguir el alimento, en ocasiones no tenemos nada y nos toca pedir fiado para poder completar la cena o el desayuno del día siguiente, no podemos permitir que los niños dejen de comer", detalla.

Las familias zulianas deben pagar hasta 500 dólares para poder costear la canasta básica, tarea que se convierte en algo imposible para gran parte de la población. Eso deriva en una inseguridad alimentaria que afecta de manera directa a un elevado número de personas que hace vida en el estado petrolero.

Datos de la Comisión de Derechos Humanos del estado Zulia (Codhez) revelan que cinco de cada 10 familias comen frutas una sola vez por semana. El cambur es lo más buscado por su bajo valor adquisitivo.

La nutricionista Thais Briceño asegura que la cantidad de proteínas que se consume actualmente en el estado se encuentra muy por debajo de los niveles mínimos requeridos para llevar a cabo una buena alimentación. Esto afectaría, principalmente, a niños y adultos mayores.

La cantidad de proteínas que consume la población zuliana es muy poca. Hay familias que con un pollo tienen que sacar para cuatro a cinco días por semana y si adicionamos vegetales, puede alcanzar un consumo máximo de 50 gramos, lo que resulta insuficiente. La cantidad mínima requerida de proteína que se debe consumir es de 150 gramos, sin embargo, debido a la situación actual, las personas solo alcanzan un total de 25 a 50 gramos diariamente", señala.

Respecto al consumo de vegetales, la especialista indicó que ha mermado considerablemente. Lo que menos falta en las neveras son tomate, zanahoria y cebolla. "Los vegetales desaparecieron por completo, la lechuga, zanahoria y el tomate es lo que más utiliza la gente, debido a su bajo precio", comentó.

Calorías a tope

Egglis Torres, también nutricionista, precisa que la alimentación de la población zuliana se caracteriza por mantener hábitos "bastantes particulares" al momento de combinar carbohidratos en una sola comida.

Este tipo de combinaciones se originan principalmente en la hora del almuerzo, lo que da pie a un consumo muy elevado de calorías que sobrepasa la cantidad alcanzada durante el desayuno y la cena.

El almuerzo de una familia zuliana está compuesto por la proteína que se prepara en guisos altos en grasa y generalmente le adicionan papa para rendirla. Luego vamos por el primer acompañante que no puede faltar: el arroz que se sirve en una cantidad bastante grande, el segundo acompañante, el favorito de la mayoría, el plátano generalmente frito. Luego está el tercer acompañante en más del 50 % de los hogares: ensalada cocida de papa, zanahoria, remolacha. Nada más en el almuerzo llegamos a consumir el 70 % de las calorías de todo el día", sostiene.

Recientes informes de Codhez advierten que siete de cada 10 personas disminuyen el tamaño de las porciones en la comida entre cuatro y cinco veces por semana, siendo el arroz y la pasta lo que más se come durante el almuerzo.

La arepa gobierna el desayuno

Al ser consultada acerca de la importancia de la arepa en el desayuno de los zulianos, la especialista en nutrición destaca que sigue siendo el plato favorito de la familia no solo en horas de la mañana, sino al momento de cenar.

Esta observación fue respaldada por la nutricionista Thais Briceño, quien aseguró que, aunque algunas personas en ocasiones deciden reemplazar la arepa con el pan, este alimento es el que más se consume con más frecuencia en los hogares.

“La arepa sigue siendo el alimento que más se consume por encima del pan, esto se debe a que rinde más. Con un paquete de harina puedes preparar alrededor de 20 arepas", precisa.

Por su parte, el nutricionista y dietista, Hendrik Márquez, destaca que es necesario diferenciar el consumo de estos alimentos por grupo poblacional, pues explica, que en el caso de los niños existe la posibilidad de aburrimiento al consumir de manera repetitiva cierto tipo de comida.

Se podría decir que en niños y adolescentes es un poco más variada la alimentación desde el punto de vista del desayuno, pero esa variedad viene acompañada de comida como pasteles y empanadas, lo que en exceso puede ser dañino para la salud, debido al uso de aceites prolongados que se emplean para la preparación de ese tipo de alimentos, explica.

Mortadela y pollo, por carne de res

Para Beatriz Pérez, comer carne de res se ha vuelto imposible. El sueldo de 130 bolívares que recibe no le permite adquirir este tipo de proteína, situación que la obliga a buscar otro tipo de alimento que contenga los mismos beneficios nutricionales.

La carne de res no se puede comprar, eso es invaluable, pero tienes que comer proteína de alguna manera y el huevo es uno de los alimentos que contiene muchas proteínas, así que es una opción viable para sustituir la carne", explica.

Asimismo, Luis Hernández considera que consumir carne es un "lujo" hoy en día, por lo que tiene que usar el ingenio para buscar alimentos que tengan cierta similitud.

El kilo de carne de res tiene un valor de aproximadamente 8 dólares. El sueldo que percibo como trabajador público no me permite costear ese alimento, por lo que prefiero comprar pollo o mortadela, que resulta un poco más económico", resalta.

Un trabajo publicado por la ONG Hum Venezuela en noviembre de 2023 agrega que 79,3 % de la población zuliana no tiene presupuesto suficiente para comprar alimentos.

Otro informe, esta vez de Seguridad Alimentaria en Maracaibo y Cabimas, realizado en agosto del mismo año por la Comisión de Derechos Humanos (Codhez), determina que 8 de cada 10 hogares consumen los alimentos que menos les gustan o los más baratos entre 4 y 6 veces en la semana.

Además, el informe señala que 61,6 % de las familias que hacen vida en el Zulia aseguran que necesitan entre 250 y 500 dólares para cubrir la canasta básica mensual. Sin embargo, solo un 3,4 % de ellos afirma tener un ingreso que alcance esta cifra.

Un 58,9 % de los hogares tiene un ingreso mensual entre 11 y 100 dólares. Si nosotros comparamos este dato con lo que realmente necesitan, en efecto, hay unos números dispares, es una diferencia bastante representativa” explica la representante de la Comisión, Loiralith Chirinos.

Granos entre las alternativas

El nutricionista Hendrik Márquez resalta que los granos se han mantenido como una alternativa en la mesa. El también profesor universitario explica que granos como las caraotas, frijoles y arvejas se consumen con una frecuencia de hasta 3 a 4 veces por semana.

Márquez señala que este tipo de alimento son una buena fuente de proteína vegetal y según, explica, lo ideal es combinarlo con otro tipo de alimento.

Si una persona consume caraotas negras con arroz o arvejas con arroz, esa unión va a generar una proteína de alto valor biológico. Es como si se estuviera comiendo pollo, carne y pescado debido a que se convierte en una proteína de alto nivel biológico, además es mucho más económico y accesible”, completa.

Respecto al consumo de queso, indica que el producto es muy utilizado por los zulianos, incluso con mayor frecuencia que la leche líquida, debido a su importancia como acompañante en distintas comidas. "Hemos tenido un incremento en el consumo y hay comunidades que lo producen, lo cual es muy positivo", refiere.

Sin embargo, en cuanto al consumo de ensalada, el nutricionista advierte que los vegetales se utilizan generalmente como ingredientes en las preparaciones, para darle sabor a la comida, aunque descarto que su consumo a través de una ensalada.

El consumo de vegetales crudos preferiblemente por el contenido de fibra y el contenido de vitaminas y minerales no se está consumiendo. Hemos observado que se utilizan los vegetales en sopas que después de licuan y con ese proceso de licuado se van perdiendo las vitaminas", sentenció.