El diario plural del Zulia

Loncheras no nutren a los escolares

Padres gastan hasta cinco mil bolívares en desayuno y merienda. Niños que se alimentan con muchos carbohidratos podrían desarrollar obesidad y diabetes durante su adolescencia.

La alimentación de los más pequeños es una de las mayores preocupaciones de los padres actualmente, y más cuando los niños regresan a clases. La preparación de la lonchera es un fuerte golpe para el bolsillo de los representantes.

Un estimado de cinco mil bolívares semanales pueden gastar los padres en alimentos básicos para surtir las loncheras de sus hijos, tan solo para el desayuno o la merienda.

“No es fácil para los padres enviarles un desayuno medianamente balanceado a sus hijos, empezando por la escasez de alimentos que nos obliga a comprar caro, y otro factor importante son los gustos de nuestros niños, porque cuando no les gusta alguna comida, tenemos un punto en contra”, afirrmó Raquel Tarazona, madre de una niña de cinco años.

Sin embargo, los padres aseguran hacer el mayor esfuerzo y hasta reducen otros gastos, para que sus hijos coman bien y puedan rendir en sus clases.

Las opciones más comunes actualmente son la arepa, el pan y las panquecas para el desayuno, acompañada tan solo con un poco de queso, mientras que las meriendas son menos elaboradas, galletas o alguna fruta.

Pocas veces las comidas de los niños incluyen alguna proteína, como pollo, jamón o huevo, que realmente les aporten valor nutricional.

Si bien es cierto que las frituras y refrescos han salido al menos en un 70% de la dieta de los niños, gracias a su elevado costo, reaparece la ingesta de carbohidratos, que a pesar de ser un poco más nutritivo para los escolares, representa un riesgo ante el consumo excesivo, según la presidenta del Colegio de Nutricionistas, Yeritza González.

“Al darles todos los días arepa o pan sin agregarles algún porcentaje de proteína es contraproducente, pues esto conlleva a la obesidad en los niños, tenemos menores mal nutridos, porque son propensos a ser obesos en su adolescencia y adultez, por el bajo consumo de proteínas”, explicó la nutricionista.

Lo ideal, según la dietista es incrementar el consumo de avenas, lácteos, proteínas, frutas y vegetales. La variedad es un punto importante, pues darles todos los días lo mismo generaría un estancamiento en su metabolismo, que afectaría tanto el desarrollo intelectual como físico.

 

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