"La naturaleza no está en cuarentena": Curarires embellecen el Jardín Botánico de Maracaibo
El Jardín Botánico de Maracaibo y los terrenos adyacentes al Aeropuerto Internacional de la Chinita se visten de amarillo con el florecimiento de los Curarires, un hecho que sólo podrá ser apreciado por las redes sociales debido al cierre del sitio por el confinamiento.
El lunes 1ero de junio, los árboles lograron alcanzar la etapa a final gracias a las últimas lluvias, informó la fundación en su cuenta en Instagram @jbotanicomcbo. Además, ratificó que el hermoso centro natural de la ciudad sigue clausurado por la cuarentena.
Pese a las circunstancias, la naturaleza nos sigue regalando un espectáculo amarillo (...) Desde la distancia disfrutamos de este esplendor", afirmó la institución destinada al estudio, conservación y divulgación de la diversidad de las especies vegetales.
Aunque no hay una fecha exacta, la floración de los Curarires suele suceder entre finales de abril y principios de mayo, días después de las primeras lluvias. Este año se retrasó un poco más por la extensa sequía de la zona occidental del país. Pero cuando la sorpresa florida llega de improviso, es mágico.
Durante esta época de florecimiento, que suele durar solo de 3 a 4 días, los marabinos hacen fila para acudir al lugar para disfrutar de la naturaleza y tomarse espectaculares fotografías en el espectacular paisaje que se forma.
Esta planta natural de las zonas tropicales de Centroamérica y Suramérica, conocida como Guamachito, Palo de Arco o Flor Amarilla, es familia del Árbol Nacional de Venezuela, el Araguaney.
Se caracteriza por ser de tronco muy fuerte y de excelente madera, además de tener propiedades medicinales por sus hermosas flores de amarillo radiante, que una vez al año engalanan el paisaje. Es una especie que se adapta bien a la sequía y agradece con esplendor cuando las lluvias bañan los campos: Una leve llovizna es suficiente para que brote la flor.
El Curarire es uno de los árboles más abundante de los bosques de Maracaibo, que además es fuerte y mejor adaptado. Esta planta crece muy rápido, da muy buena cobertura y protege el suelo.
